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El derbi asturiano

Rivales peñistas en la familia

Juan Luengos preside la peña del Sporting de Llanera y su hijo Jairo es socio de la del Oviedo

Juan Luengos, Jairo Luengos y Mireia Pérez. J. L.

Mireia Pérez, la madre, es la encargada de poner paz. "Según como vaya el partido, puede acabar cada uno viendo la televisión en un lugar diferente", explica. Se refiere a su marido, Juan Luengos, aficionado del Sporting y presidente de la Peña El Cruce de Posada de Llanera, y a su hijo, Jairo Luengos, aficionado del Oviedo, y que forma parte de la Peña Azul Iris de la misma localidad. Como en muchas familias existen sentimientos divididos, pero en este caso la pasión se acrecienta aún más, porque esa pasión la trasladan a la intensidad con la que las peñas siguen el fútbol. "Se vive todo de manera diferente, te contagia el entusiasmo de una peña", comenta Jairo. "Tanto por aquí, como por las actividades que hacemos, como por los viajes, se disfruta mucho más del fútbol", añade Juan.

Mañana los tres seguirán en casa juntos el derbi. Les hubiera gustado vivirlo juntos en El Molinón, como hace dos años, o en el bar que regentaba antes Jairo, que pese a ser oviedista era la sede de la peña rojiblanca, pero el nuevo escenario les hará pasar a un plan más familiar. "Lo veo difícil para el Oviedo, cada vez tenemos menos margen de reacción. Necesitamos ganar. Ahora mismo me fío Rodri y Borja Sánchez para ganar", cuenta el seguidor azul de la familia. "Ellos lo necesitan mucho más, pero si ganamos podremos creer en esta arriba de verdad. Siempre me presta un poco que el Oviedo esté algo mal, soy muy sportinguista", apunta a su lado su padre, para picar a su hijo. "Fuera de bromas, deberían estar los dos en Primera, es como más disfrutaríamso los derbis", apostilla.

Jairo Luengos se hizo del Oviedo por sus tíos, que le llevaron al Tartiere. Aunque antes lo había llevado alguna vez su padre a El Molinón. Después a Juan no le quedó más remedio que ir alguna vez Tartiere cuando Jairo era pequeño. "Lo triste es que no podamos ver los tres un derbi juntos, con nuestras camisetas en la grada. Si voy al Tartiere de rojiblanco con él pueden decir algo", lamenta. "Yo fui a El Molinón con mi padre, sin nada azul, y ni siquiera pude celebrar el gol de Toché", apunta Jairo.

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