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PESCA | EL FINAL DE UNA CAMPAÑA ATÍPICA

El salmón se libra del virus: buenos datos y optimismo en el cierre de temporada

Pese a su reducida duración por el covid-19, la temporada se acaba con buenas expectativas por la entrada de añales

Cuco Mori, con sus hijos Efrén y Armando, con un salmón de tres kilos capturado el martes en el Sella. J. M. C.

La campaña salmonera, retrasada este año por el estado de alarma ante la pandemia de covid-19, se saldó con satisfacción, pese a que no se pueden comparar las estadísticas de capturas con otras anteriores debido a que arrancó el 19 de mayo. Aun así, se superaron con creces los 800 ejemplares en aguas continentales del Principado de Asturias y lo mejor está por venir: hay cantidad de añales remontando en estas fechas estivales en las principales cuencas de la comunidad autónoma.

El primer salmón de la temporada 2020, con un peso de 5,300 kilos y 76 centímetros de longitud, fue echado a tierra el 19 de mayo, por el experimentado pescador Íñigo Fernández Amantegui. Lo capturó en el Narcea, en el coto parcial de El Güeyu. También la cuenca del Narcea, aunque en este caso en el Nalón, propició que el sierense Raúl Sánchez pescase el 6 de junio el salmón de mayor peso de la campaña, de 11,645 kilos y 98 centímetros de longitud.

Cuco Mori, uno de los expertos pescadores del Oriente, valoró positivamente la temporada: "En general, bien, para lo que se pudo pescar, salvo Esva y Eo. El Narcea muy bien y salmones grandes. Están entrando muchos añales ahora y ya no podemos pescar y esto ya hace varios años que se repite, que entran los añales después del cierre con muerte". Mori añadió que "la temporada debería de ser con todos los cebos hasta el 15 de julio y luego cerrarlo. La pesca sin muerte, con los ríos con tan poca agua, revienta a los salmones, pues para traerlo a la orilla lo tienen que agotar y no oxigenan. Luego pasa lo que pasa, que aparecen muchos muertos".

Durante la campaña salmonera, Cuco Mori consiguió capturar dos ejemplares, ambos en el Sella, y otros dos se le soltaron. El Covid-19 le impidió disfrutar de un par de cotos que tenía en Galicia. "Los perdí, pero para otro año será. El martes sacó uno mi hijo Efrén en el coto de Los Llaos, en el Sella, de tres kilos de peso, que me prestó más que ninguno de los salmones míos", apuntó el ribereño de Cangas de Onís, hermano de José Manuel Mori Cuesta, "El Marqués".

Al otro lado de la región, las cosas también se ven desde el lado positivo, como explica Luis Eduardo López Alvaré, conocido como Villa: "La temporada del Narcea-Nalón fue muy buena y será refrendada como extraordinaria cuando se realicen los censos, en la que los salmones de primavera, de un peso excepcional, se solapa con los añales que siguen entrando e incluso alguno de buen tamaño. El Eo se viene abajo, no hay ninguna asociación allí que realice el trabajo. En el Esva se ven peces, pero el coto de Piedra Blanca está perdido para la pesca si no se actúa sobre él, pues los salmones van directos al vedado y se almacenan en el refugio del Benito, que era donde salía el grueso de las capturas. Los pescadores apenas tienen una zona libre con posibilidades".

Según López Alvaré, "el Sella estuvo condicionado por el escaso caudal, pero seguro que cuando lleguen los censos albergará una buena salmonada. El Cares-Deva ha mejorado en los últimos años y quedan muchos peces. Se nota una clara recuperación del salmón de primavera, atrás queda la década de los 90 en que maquillaban las temporadas los añales. Es un logro de la Administración y las asociaciones de pescadores, al repoblar con salmon autóctono. Fue un acierto". Villa completó el cupo de salmones en la cuenca Nalón-Narcea. "Acabé el 20 de junio Necesité trece jornadas. Solo pude pescar un coto por Asturias. En Galicia y Cantabria los perdí por el covid".

En el Cares-Deva, José Carlos de Diego Casquero, de Lada (Langreo) echó a tierra el 11 de junio el segundo salmón de mayor peso, de 11,550 kilos, en el coto de El Tilo, donde se completó el cupo con otras dos piezas (2,300 y 4,600 kilos, a cargo de Antonio Soberón y Millán Martínez, respectivamente, ambos vecinos de Alles-Peñamellera Alta). Además, tenía la aleta adiposa cortada, siendo por lo tanto un ejemplar de repoblación.

Para acabar, 16

Para acabar, 16

La última jornada de pesca se saldó con 16 capturas, con el Narcea una vez más a la cabeza con nueve salmones. El Eo se despidió con tres ejemplares echados a tierra, mientras que el Cares y el Sella ofrecieron dos cada uno. El Esva cerró su balance con el campanu del martes, en la víspera del final de temporada.

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