Plácido encuentro del Grupo IMQ, ayer, ante un flojo Universidad de Valladolid que no inquietó lo más mínimo a los grupistas, que a los cinco minutos ya ganaban por cuatro goles de diferencia. La defensa pucelana apenas existió y los gijoneses fueron aumentando la diferencia de manera paulatina pero constante, hasta el punto de que al descanso ya ganaban por una diferencia de doce tantos.

En la reanudación, las cosas no variaron y la ventaja local llegó a ser de 21 goles (35-14) a falta de cinco minutos para el final.

Chechu Villaldea hizo jugar a la plantilla al completo y todos los jugadores de campo acabaron marcando algún gol, faceta en la que destacó Diego Fernández Valdés, con 9 tantos.