La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

HÉCTOR GALÁN | DIRECTOR GENERAL DEL LIBERBANK OVIEDO

"Confío en la capacidad de Lezkano para exprimir al equipo"

"El objetivo es la permanencia, pero siempre he tenido la norma de mirar hacia arriba, no abajo"

Héctor Galán, director general del Liberbank Oviedo Baloncesto. IRMA COLLÍN

El domingo, cuando vuele por fin el balón en Pumarín, Héctor Galán tendrá la sensación de que se acaba una larga e incierta travesía, que empezó allá a primeros de marzo. Todo lo que ocurrió después condicionó el trabajo de este hombre, clave para el Oviedo Baloncesto más allá de su cargo de director general. La pandemia le ha situado en una posición parecida a la de sus primeros años en el club, cuando tuvo que hacer equilibrios económicos para competir. Sobre las dos de la tarde del domingo, tras el partido frente a uno de los favoritos de la LEB Oro, el Breogán, se verán las primeras pistas de lo que puede ofrecer el equipo entrenado por Natxo Lezkano, el pilar del nuevo proyecto.

- ¿Cómo calificaría lo que ha vivido en estos meses?

-Complicado. Estamos en vilo porque no sabemos si en cualquier momento habrá que parar la competición.

- ¿Le preocupa más eso que lo que pueda hacer el equipo?

-Sí, tengo esa sensación. El primer éxito sería poder jugar el domingo, después de tantos meses y de esta pretemporada tan complicada. Sería un pequeño paso. La preocupación por los resultados vendrá después porque ahora mismo hay cosas más importantes.

- ¿Cómo valora la normativa sobre los test?

-Es una piedra más en la mochila económica de los clubes. De la idea inicial de no cargar el coste de los test a los equipos, se pasó a que sí. La Federación Española se hace cargo de las tres primeras jornadas, pero es que hay 26. Es verdad que los serológicos son más baratos, pero pueden suponer cuatro o cinco mil euros al año.

- ¿Y el frustrado salto al Palacio de los Deportes?

-Estamos resignados. Se intentó jugar en el Palacio, por lo que sea no se pudo hacer, y ya está. No sirve de nada lamentarse.

- Pierden uno de sus grandes activos, el apoyo del público en un Pumarín lleno.

-Sí. El Ayuntamiento fijó un aforo de 311 asientos disponibles, por lo que hablamos de una campaña de socios con un 50 por ciento menos que la temporada pasada, en el mejor de los casos.

- Habrá sido el año más complicado para formar la plantilla.

-A final, tampoco ha sido muy diferente a otros. Lo complicado fue ajustar nuestra situación al mercado. Otros clubes lo sufrieron menos, pero el recorte para nosotros es muy importante. Veníamos de dos o tres temporadas con una posición de mercado y ahora tuvimos que ir hacia otro perfil. Una vez que aceptamos eso, no es muy diferente. Ha habido años de presupuestos muy ajustados. Unos salieron bien y otros, menos. Pero intentas ir hacia delante.

- ¿Eso quiere decir que está satisfecho con la plantilla?

-Estoy contento del trabajo que hemos hecho, de haber entendido rápidamente cual era la situación para movernos en ese escenario. Y siempre de acuerdo con Nacho. Hay que tener en cuenta que cuando llegó el entrenador, la idea era una, y ahora es otra.

- ¿Se puede hablar de un objetivo de mínimos?

-Hemos hecho un buen trabajo. El objetivo mínimo es la permanencia, como todos los años. Es mi octava temporada y siempre he tenido la norma de mirar hacia arriba, no hacia abajo. Lo bueno del nuevo sistema de competición es que en enero vas a saber por qué estás peleando.

- ¿El retraso en la llegada de Kabasele afecta mucho?

-Es un "5", un interior nato, el que nos tiene que dar equilibrio para la rotación con Arteaga y los dos Marc (Martí y Norelia). Nos deja un poco cojos porque nuestra idea era tener incluso cinco jugadores interiores.

- ¿Cómo está su situación?

-El de Kabasele es el culebrón del verano. Sabíamos que podía suceder, con él y otros jugadores que vinieran de fuera de España, por las dificultades de los desplazamientos. Tenía un permiso de residencia del año pasado en España. Caducó en abril, se renovó, pero en Congo no reconocen su situación. Esperamos que le den un visado para viajar y, una vez aquí, regularizar su situación.

- ¿Teme que los problemas fisicos de Arteaga y Saúl Blanco condicionen al equipo?

-Ya sabíamos lo que podía pasar. Ha habido semanas en que he dejado de ir a los entrenamientos porque me ponía nervioso con tantas lesiones.

- ¿En estas circunstancias la figura del entrenador resulta aún más importante?

-No lo comparo con otros años, pero sí tengo claro que Natxo va a ser importantísimo. Es uno de los entrenadores con más experiencia en la categoría. Salvo Arteaga y Saúl, tenemos jugadores muy jóvenes o que son nuevos en la categoría. Confiamos en la capacidad de Natxo para exprimir y sacar partido a los equipos. Por ese lado no tenemos ninguna duda.

- ¿Perjudicará el cambio de los partidos a los domingos?

-Si hay algún año en que nos podamos adaptar es éste. Yo creo que la afición lo va a entender. Lo que importa es que la gente se divierta, que vea un equipo que da la cara. No tengo dudas de que va a estar con nosotros.

- ¿Preocupado por las derrotas de la pretemporada?

-Claro que me hubiese gustado ganar, pero hemos competido contra cuatro equipos que van a estar entre los mejores de la LEB Oro. Lo que lamento es que no hemos podido ver entrenar al equipo al completo durante dos semanas.

Compartir el artículo

stats