El maliayés Manuel Busto Fernández (Villaviciosa, 1975) y la sevillana Beatriz Manchón Portillo (Sevilla, 1976) continúan su periplo judicial por el supuesto caso de “discriminación” en el Descenso Internacional del Sella, la tradicional Fiesta de las Piraguas de Asturias, prueba en la que no han logrado que se les permitiera tomar parte en la categoría K-2 senior, aunque sí se les autorizaba inscribirse y participar en la preceptiva categoría mixta K-2.
“Hoy (por ayer) tengo una buena noticia... El Tribunal Supremo ha admitido a trámite nuestra denuncia por discriminación en el Sella”, contaba la propia Manchón a sus seguidores en distintos foros. “Aunque esto vaya despacio, siempre es buen momento para agradeceros a todos vuestro apoyo. Seguimos”, escribió a primeras horas de la tarde de ayer la kayakista olímpica.
Hace algo más de un año la Sección Sexta de la Sala de lo Contencioso-administrativo de la Audiencia Nacional dio la razón al Comité Organizador del Descenso Internacional del Sella (CODIS), que preside Juan Manuel Feliz Granda, y también a la Real Federación Española de Piragüismo, ésta bajo la presidencia de Juan Jose Román Mangas, que se personó en la causa, al recurrir los laureados palistas a su Juez Único y a su Comité de Competición.
