En un partido flojo, con muy pocas ocasiones, Manu y decidió a favor del Titánico. El equipo de Laviana fue capaz de aprovechar la única ocasión del partido para llevarse el duelo. Una acción que llegó tras cinco córners consecutivos, despeje tras despeje de la defensa local, que acabó con Manu rematando solo en el área pequeña. Un tanto que sería definitivo porque, a partir de ahí, el Titánico estuvo serio en defensa y L’Entregu muy espeso, especialmente en ataque.