El Círculo Gijón sigue sin carburar fuera del Palacio de los Deportes de Gijón y en la tarde de ayer encajó una nueva derrota, esta en la cancha del Zornota, segundo clasificado.

Nacho Galán podía contar con más jugadores que en las últimas jornadas tras la recuperación de Marcos Portález y el fichaje de Quarry Greenaway, que entraron en el quinteto inicial, pero ni así pudieron dar un giro a sus flojas actuaciones a domicilio.

Los gijoneses empezaron muy mal y el partido se les fue ya en el primer cuarto en el que tras unos primeros tres minutos en los que fueron por delante, 3-6, solo fueron capaces de anotar otros cuatro en los siete minutos restantes. El Zornotza se aprovechó de los errores gijoneses y les endosó un parcial de 21-4 para llegar con una diferencia de 14 puntos, 24-10, al final de los primeros diez minutos. Los habitualmente certeros tiradores del Círculo Gijón no estuvieron bien en este cuarto y además Greenaway cometió dos personales muy pronto.

La ventaja local aumentó a los 16 en la primera jugada del segundo cuarto, aunque con el paso de los minutos los gijoneses lograron frenar el acierto del conjunto vasco hasta el punto de que decantó a su favor este parcial, 11-16, para llegar al descanso con una desventaja de 9 puntos, 35-26, y toda la segunda parte para intentar la remontada.

El tercer cuarto fue el mejor con los dos equipos acertados en sus acciones, aunque los locales volvieron a recuperar la ventaja perdida en el segundo cuarto y encararon los últimos 10 minutos de nuevo con 14 puntos de diferencia a su favor, 65-51.

Eso le permitió jugar a favor de marcador, y aunque el Círculo Gijón lo intentó e incluso estuvo más acertado que hasta ese momento, la desventaja era demasiada y solo pudo maquillar el resultado final.

Para Nacho Galán “el primer cuarto fue determinante, nos desarbolaron”. El técnico volvió a quejarse de “poca dureza bajo los aros” y reconoció “poco acierto en el tiro exterior en la primera parte”. El técnico apuntó que “quedan nueve partidos que va a ser todos muy duros y muy difíciles”. El equipo se centra ya en su próximo rival, Clavijo, que no tiene el potencial del Zornotza.