Miles de aficionados de la Real Sociedad se han saltado las medidas contra la Covid-19 para despedir al equipo en su partida hacia Sevilla para disputar este sábado contra el Ahtletic la final de la Copa del Rey.

El autobús del equipo 'txuri-urdin' ha salido hacia el aeropuerto de Hondarribia desde las instalaciones del club de Zubieta a las 10.45 horas como estaba previsto. El presidente, Jokin Aperribay, ha sido de los primeros en llegar a Zubieta algo antes de las diez de la mañana.

Allí han sido recibidos por miles de aficionados con banderas, camisetas y bufandas del equipo, pese al llamamiento a evitar a aglomeraciones, animando con cánticos y aplausos al equipo.

Los simpatizantes de la Real Sociedad han hecho un pasillo al autobús del equipo siguiéndolo por las inmediaciones de Zubieta, sin que se respetasen las medidas de distancia social, y se han agolpado en los accesos al campo. La marea 'txuri-urdin' también ha estado presente en torno al aeropuerto de Hondarribia desde primera hora de la mañana.

El club donostiarra ha pedido a través de sus perfiles en redes sociales a los aficionados que, en los próximos días en los que se van a "vivir momentos de gran intensidad", se comporten "en todo momento respetando todas las medidas sanitarias vigentes".

La Policía municipal de San Sebastián ha planificado un dispositivo para que la aglomeración prevista ante un llamamiento por parte de los aficionados fuera "la menor posible", según han informado a Europa Press fuentes municipales.

En el mismo también ha participado la seguridad privada de la Real, que ha vallado la zona para evitar que se invadiera la carretera y lo ha controlado con personal en el lugar.

En ese sentido, pese a que se ha concentrado un número grande de personas, "no ha habido incidentes, se ha respetado la obligatoriedad de llevar mascarilla, y al finalizar se ha disuelto sin problema".