En torno a las seis de la tarde, con parte del grupo efectuando la segunda sesión de trabajo del día a las órdenes de Gallego, Djuka apareció por Mareo. El delantero serbio, que tenía permiso del club para incorporarse más tarde a la pretemporada, tuvo ayer su primera toma de contacto con la escuela rojiblanca. Tras someterse el pasado jueves al test PCR, ayer a mediodía conoció que había dado negativo. Y por la tarde se acercó a Mareo para efectuar las pruebas médicas y realizar los primeros ejercicios en el gimnasio. Hoy, si nada se tuerce, el atacante serbio ya trabajará sobre el verde a las órdenes de David Gallego.
Con la cesión de Manu García al Alavés ya resuelta, el próximo paso del club será la venta de Djuka, un jugador por el que la entidad esperar ingresar una buena cantidad que le permita coger aire en el plano económico. Aunque tampoco se descarta su continuidad si no existe ninguna oferta que se ajuste a lo que se espera.
El futbolista, mientras tanto, tiene el objetivo de trabajar con el mismo compromiso que los últimos tres años en el Sporting. Djuka ya avisó en una entrevista a LA NUEVA ESPAÑA que su continuidad se antojaba complicada si el equipo no subía a Primera. Aún queda por delante más de un mes y medio de mercado, en el que el atacante serbio acaparará las miradas.
