El conjunto de natación artística logró la primera medalla para la delegación española en los Mundiales de Budapest, tras colgarse este sábado el bronce en al final de 'Highlight'.

Tras ver como Emma García y Pau Ribes, al igual que les ocurrió en la rutina técnica, volvían a quedarse a las puertas del podio, al concluir cuartos en la final del dúo mixto libre, la natación artística española no estaba dispuesta a marcharse de vacío de la capital magiar.

Para ello, que mejor que los 'Highlight, la más joven de las modalidades de la natación artística, que entró en el programa mundialista en los pasados campeonatos de Gwangju 2019, para alcanzar el ansiado podio. Una modalidad en la que se premia, por encima de todo, la espectacularidad y la creatividad, los puntos fuertes del equipo español, que si por algo ha destacado a lo largo de su historia es por sus rompedores ejercicios.

Rutinas llenas de imaginación como la que presentaron este sábado las nadadoras españolas en la piscina del complejo Alfref Hajos bajo los acordes del tema 'Thunderstruck' de la banda de rock australiana AC/DC.

Empoderadas con las chaquetas de cuero rojo que simulaban sus bañadores el conjunto español, integrado por Cristina Arambula, Abril Conesa, Berta Ferreras, Emma García, Mireia Hernández, Meritxell Mas, Alisa Ozhogina, Paula Ramírez, Iris Tió y Blanca Toledano, salió al agua dispuesto a 'dar caña' en busca de la medalla.

Una vibrante rutina en la que España encadenó espectaculares acrobacias con sorprendentes figuras que no pasaron desapercibidas para los jueces, que valoraron especialmente la impresión artística del ejercicio español. Todo ello a un ritmo endiablado que conformó un todo con la música de AC/DC como si el mismísimo Angus Young estuviese haciendo su famoso 'duck walk' en la piscina de la capital magiar.

"Esta es una rutina que nos da mucha energía y teníamos muchas ganas de nadarla. Hemos tenido que trabajar mucho, porque no ha sido fácil, pero hemos logrado ganar una medalla", señaló Paula Ramírez en declaraciones difundidas por la Federación Española de Natación. Una apuesta ganadora que hacía casi imposible que España no lograse un lugar en el podio.

Ambición al máximo

Pero las integrantes del equipo español no se conformaban con la medalla de bronce a las que parecía destinarlas la tercera plaza en la que concluyeron la ronda preliminar y lucharon como nunca para enjugar las apenas tres décimas de punto que las separaron de las transalpinas en la fase clasificatoria.

Un momento del ejercicio del conjunto español. Reuters

Un esfuerzo que España vio recompensado tras ver como superaba en más de medio punto su calificación de la preliminares, al firmar en la final una nota de 91,9333 puntos.

Sin embargo, la mejoría del conjunto español no fue suficiente para arrebatar la medalla de plata a las 'dragonas' italianas, que mantuvieron finalmente la segunda plaza por tan sólo 0,3334 puntos, tras lograr una calificación de 92,2667 unidades. Y es que si España destacó por la impresión artística de su ejercicio, el conjunto italiano sobresalió por la variedad y dificultad de sus acrobacias.

Un momento del ejercicio del equipo español. Reuters

Aunque para acrobacias las del equipo ucraniano, que revalidó el oro que conquistó hace tres años en Gwangju, al igual que ocurrió en Budapest por delante de Italia y España, con una rutina plagada de saltos y elevaciones. Un formidable ejercicio que valió a Ucrania para lograr la primera posición con una nota de 95,0333, más de dos puntos y medio más -2,7666- que el equipo italiano, y tres más -3,100- que el conjunto español.

Distancia que no parece intimidar al equipo español, que ya piensa en dar caza a ucranianas e italianas en próximos campeonatos.

"Esto no acaba aquí, todo lo contrario, empieza aquí. Así que a seguir luchando a muerte y seguir trabajando muchísimo para el año que viene estar todavía más arriba", concluyó Meritxell Mas.