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Los pasos que deben seguir el Sporting y el Oviedo tras los contagios: la Liga puede investigar si hubo imprudencia

La Liga establece un plan de actuación si hay un positivo

El autocovid, ayer en Mareo

El covid ha golpeado duro al fútbol asturiano tras la vuelta de Navidades. Ocho positivos en el Sporting (seis jugadores y dos empleados) y otros dos en el Oviedo es el balance por el momento. ¿Cuáles son los pasos a seguir? Los dos clubes más importantes del deporte rey del Principado entran ahora en una fase de continua vigilancia por la Liga. Todo está medido al milímetro por el organismo que dirige Javier Tebas.

Para empezar, lo que se considera brote. La patronal lo define como “cualquier agrupación de tres o más casos con infección activa y de detención simultánea o cercana en el tiempo, en los que haya indicios lógicos de vínculo epidemiológico”. Es el caso del Sporting, con ocho contagios, pero no el del Oviedo, con dos.

La Liga, responsable del protocolo covid, establece minuciosamente el plan a seguir en el caso de que se detecte al menos un positivo en un equipo de fútbol. El Oviedo y el Sporting ya lo siguen. La primera actuación es aislar a los jugadores contagiados.

Su cuarentena durará diez días como mínimo “siempre y cuando no se desarrollen síntomas”. En el caso de que los futbolistas sí tengan síntomas, el protocolo establece que el aislamiento se debe mantener hasta tres días más desde “la resolución de la fiebre y del cuadro clínico con un mínimo de diez días desde el inicio de los síntomas”. Oviedo y Sporting, además, deben comunicar los positivos al servicio de Salud del Principado de Asturias y también a la propia Liga.

Una vez conocidos los positivos, la pelota recae en los servicios médicos de los clubes, hasta arriba de trabajo desde el estallido de la pandemia.

Los equipos médicos, dirigidos por Antonio Maestro en el Sporting y por Manuel Rodríguez en el Oviedo, deben realizar un minucioso rastreo de los contactos estrechos de los positivos entre compañeros y empleados durante las 48 horas anteriores a la realización de la prueba. El informe de los servicios médicos debe ser entregado a la Liga. La propia patronal, además, habilita un servicio de apoyo a los clubs para facilitar dicho rastreo.

Si hay algún contacto estrecho del positivo de dentro del club, debe aislarse 14 días, aunque pasados diez puede romper la cuarentena en el caso de que su prueba sea negativa. Por otro lado, la Liga y los clubes deben poner a disposición del entorno familiar de los jugadores positivos test rápidos y el resto del equipo solo podrá entrenarse de forma individual hasta que no se conozcan los resultados de las pruebas.

No es el caso del Oviedo y del Sporting, de vuelta tras el parón, pero el control de la Liga llega a tal punto que si en un equipo surge un positivo y ha jugado un partido 48 horas antes de saberlo, la patronal realizará un análisis mediante la aplicación Mediacoach para saber qué contactos estrechos han podido tener los jugadores durante el encuentro.

Los clubes, a instancias de la Liga, realizarán pruebas PCR y serológicas a los positivos cuando pasen diez días de la primera, siempre y cuando lleve tres días sin tener síntomas. Si hubiese síntomas, hay que esperar tres días desde que estos desaparezcan.

El positivo solo podrá volver a la dinámica del equipo con una PCR negativa tras el aislamiento o con una positiva acompañada de “serología Ig G positiva”. Eso significa que, aunque la prueba PCR dé contagio, la persona no tiene capacidad para infectar. Si el positivo no registrar ninguno de esos casos, se le repetirá la prueba tres días más tarde.

Respecto a la parte competitiva, el protocolo establece que un equipo afectado por covid debe presentar un mínimo de 13 jugadores sanos, cinco de ellos con ficha profesional. Así mismo, un club de Segunda con covid tiene la posibilidad de pedir el aplazamiento de dos partidos de la Liga. Al tercero, se le dará como perdedor por 3-0.

La Liga, además, también se reserva la posibilidad de solicitar la apertura de un expediente disciplinario en caso de que pueda existir un caso de “negligencia o imprudencia” por parte del jugador o del club. En ese caso, la patronal de los equipos deberá dar traslado al Juez de Disciplina social. Lo mismo sucedería en el caso de que la Liga detecte que se ha ocultado información.

La patronal considera ocultación el “olvido o la negligencia” más allá de las 24 horas posteriores al conocimiento del positivo o a la presunta infracción. Si existiese un expediente disciplinario se tramitaría de forma urgente e incluso podrían tomarse medidas provisionales.

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