El Liberbank Oviedo Baloncesto doblegó hoy (83-75) al Ourense en un partido que empezó mal y acabó muy bien. Los de Natxo Lezkano entraron en el inicio de partido en un ritmo mortecino que no le interesaba y fruto de ello el equipo gallego llegó a coger once puntos de ventaja (9-20) a 2 minutos de acabar el primer cuarto. A raíz de ahí, con Norelia activando al equipo y con Oliver Arteaga dando un nuevo recital, las cosas cambiaron. Y mucho. Dirigido por un Speight en estado de gracia (acabó el partido con 16 puntos y 4 asistencias), el conjunto ovetense fue afianzando una ventaja que se disparó a los 11 puntos a 8:31 del final (71-60).

Pero al equipo de Lezkano le volvió a entrar el miedo a ganar, como en los partidos ante Palencia y especialmente en el desastre de La Coruña, y, incapaces en ataque, vieron como la renta se quedaba en solo dos puntos (73-71) a 4:24 de acabar el encuentro. Pero esta vez llegaron Norelia y Speight para desatacar la situación, y Arteaga ejerció del líder que es. Y, encima, esta vez todo esto lo pudieron ver 300 espectadores que disfrutaron de lo lindo con los suyos.

En estos momentos, con 5 victorias y 5 derrotas, son quintos en la clasificación, en el grupo que jugaría por el ascenso, pero dentro de una lucha que será cruenta hasta el final de la competición.