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Radiografía del deporte asturiano en la pandemia: Profesionales en la incertidumbre

Carlos Fernández, del Judo Avilés: “Yo tengo que estar formado para hacer mi labor y los políticos toman decisiones de mi parcela sin saber”

Carlos Fernández, director deportivo del Judo Avilés Ricardo Solís

Carlos Fernández se debate entre el cabreo que le produce el trato que se da al deporte en Asturias y la máxima que trata de inculcar a sus alumnos del Judo Avilés. “Les digo todos los días que la queja continua no sirve de nada y que de lo que se trata es de que, cuando se abran las puertas, cuando seamos libres de nuevo, estemos preparados para ser los mejores”. Y eso que también a él le entra la “mala leche” cuando habla de las medidas que se han adoptado en la región durante la pandemia. Lo que más le duele no son las restricciones, que acepta y en las que a veces han sido incluso más severo que el ejecutivo regional, sino “la improvisación, el desconocimiento y la incertidumbre” que, en su opinión, han regido todo este tiempo.

Piensa que en Asturias se considera al deporte como “una maría”, una de esas asignaturas a las que nadie da importancia, como algo que solo tiene cierta relevancia en el momento de sacarse una fotografía cuando llega un éxito. “No dejamos de ser una maría, importamos a quien importamos, estamos en una consejería que ni nos nombra y lo que sucede es que las decisiones las toma gente que no sabe del tema. Yo tengo que tener una formación para dar mis clases y los políticos que toman decisiones sobre mi parcela lo hacen sin tener ningún conocimiento”, señala el director deportivo del Judo Avilés. Su club ha sufrido los rigores de la pandemia con severidad, quedándose en un 25% de los alumnos que tenía: de 400 han pasado a tener 96.

Un combate de judo en Avilés Mara Villamuza

Un daño que, explica, tiene mal arreglo: “Al bar se va a volver con muchas ganas, yo el primero; pero el deporte no es lo mismo porque requiere de una preparación y exige un sufrimiento al principio. Para nosotros la pandemia no se va a acabar cuando los políticos digan que se ha acabado, esto va a durar mucho tiempo y quizás nunca recuperemos lo que teníamos”, lamenta.

El Judo Avilés tuvo que tomar decisiones como la de suspender el Torneo Villa de Avilés, algo que hicieron con pena, pero asumiendo que era necesario: “Es el torneo más importante de España y lo suspendimos siendo conscientes de que había que hacerlo, una competición con 1.500 deportistas no se podía afrontar en esta situación, con todo lo que arrastra, pero no sé si son conscientes de lo que supone, de que lo único que ha llenado Avilés ha sido el deporte, no solo nosotros, el Mundial de biatlón trajo a muchísima gente. Tenemos que ponernos en valor y en esas estamos”, explica Carlos Fernández. El que sí que celebraron, aunque fuera on-line, fue el Torneo de Navidad Ciudad de Avilés: “Estuvimos durante diez días casi 100 judokas por parejas”.

El director deportivo del club avilesino es de los que tiene que responder a diario para tratar de resolver las dudas de mucha gente que no sabe qué es lo que puede y lo que no puede hacer: “Hasta ahora teníamos que tener, como mucho, a 16 personas en el tatami y la semana pasada se le dio la vuelta y se pasó a tres microgrupos de seis personas, es decir, en total 18; es que las decisiones las toma gente que no tiene ni idea”, insiste. Unas normas que han hecho, entre otras cosas, que Asturias sea “la única comunidad que no ha participado en el campeonato de España absoluto. Todo es kafkiano”.

Luego está el tema de la prohibición de hacer deporte fuera del colegio a los menores de 16 años, otro de los asuntos que desesperan a los profesionales: “El mensaje que reciben los adolescentes es que no practiquen deporte, que vean Youtube, y todo cuando hasta ahora nos habían contado que el deporte era fantástico, pero es que hay que ponerlo en valor como un factor bueno para la economía y para la salud. Si la práctica deportiva se hace bien no somos un factor de riesgo y, además, el deporte es una de las mejores herramientas para que no se colapse el sistema sanitario. Está comprobado y demostrado que el deporte protege el sistema inmunológico”, señala.

Carlos Fernández considera que las restricciones al deporte escolar han sido “como un tobogán”: “Hemos pasado por todo, ahora se puede entrenar, ahora resulta que no se puede... nos están volviendo locos. ¿Quién sabe qué será mañana? Los menores no pueden competir y los mayores solo a nivel nacional. En la Liga Nacional podríamos competir, pero hay que pasar unas fases previas y ahora estamos tratando de poner en marcha en Asturias un campeonato clasificatorio porque se necesitan filtros para saber a qué gente llevar”. El director deportivo del Judo Avilés dice ser partidario de “restricciones”, pero que estén “fundamentadas con datos, que no sea lo que se le ocurra a un político porque llega un momento en que no sabes a qué atenerte”.

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