“Ray se puso el objetivo de la medalla olímpica y ahí está”. Son palabras de Benjamín Bango, el entrenador asturiano de Ray Zapata, el primer gimnasta español que se sube al podio de unos Juegos Olímpicos desde que lo hiciera Gervasio Deferr en 2008 en Pekín.
El propio Ray Zapata bromeó tras su éxito en Tokio sobre el nivel de exigencia de Bango: “Mi entrenador me da mucha caña, pero yo le pido más”. Benjamín Bango, formado en el Grupo Covadonga, fue voluntario olímpico en los Juegos de Barcelona-92 y participó en los Juegos de Sidney 2000 y Atenas 2004 como juez. Después se reenganchó a la cita como ayudante del seleccionador del equipo español de gimnasia en Londres 2012.
“Una medalla olímpica es uno de los mayores desafíos de un deportista, y más en gimnasia, que es el evento referente de los Juegos”, señaló el entrenador gijonés, que añadió: “Estoy muy feliz por Ray, por todo lo que ha luchado para conseguirlo. Es un privilegio verle cumplir su sueño. También feliz por la gimnasia artística, que ha demostrado una vez más, la última en Pekín con Gervasio Deferr, que puede alcanzar los mayores desafíos. Y, por supuesto, por el deporte español, al que la gimnasia ha sumado una plata olímpica”.
