Real Avilés, 2-Compostela, 2
Real Avilés: Davo Armengol (1); Nacho López (1), Estellés (1), Jorge Morcillo (2), Juanmi Carrión (1); Vidorreta (1), Javi Pérez (2), Iago Díaz (1); Sergio García (1) Natalio (1) y Kilian Grant (1).
Cambios: Ródenas (1) por Natalio y Hualde (1) por Iago Díaz, min. 58. Cedrick Mabwati (1) por Sergio García, min. 64. Toni García (1) por Kilian Grant, min. 78.
Compostela: Pato Guillén (1); Roque González (1), Roberto Baleato (1), Guille Torres (1), Salado (2); Juanma Parapar (1), Fer Beltrán (1), Pablo Antas (2), Jordan Domínguez (1); Pablo Durán (1) y Rodri Escudero (1).
Cambios: Mario Constenla (1) por Fer Beltrán, Primo Conde (1) por Juanma Parapar y Rafa Mella (0) por Pablo Durán, min. 73. Josiño Filgueira (1) por Rodri Escudero, min. 87. Goles: 0-1, min. 25: Pablo Durán. 1-1, min. 34: Sergio García. 1-2, min. 57: Pablo Antas. 2-2, min. 68: Jorge Morcillo.
Árbitro: Castellanos Argüeso (Santander). Tarjetas amarillas para los locales Jorge Morcillo, Vidorreta y Hualde, y para los visitantes Roque González, Salado, Pablo Antas, Mario Constenla y Guille Torres.
Suárez Puerta: 814 espectadores.
El empate entre dos de los peores equipos en lo que llevamos de 2022, tramo en el que sólo la puntuación del Ceares es inferior, enmaraña los objetivos de Real Avilés y Compostela, que mantuvieron una lid más cargada de respeto mutuo que de otra cosa.
El partido, más allá de la emoción que encarnan los puntos, ofreció muy poco. No es que lo más destacado fuera el toque de balón que Paula Fernández, Xana de las Fiestas Pascuales de El Bollo, efectuó en los honoríficos prolegómenos, pero es que los contendientes tampoco mostraron mucho más. Quizá sea esa ansiedad, que el Real Avilés no esperaba padecer a estas alturas y que el Compostela también sufre por sus nueve partidos consecutivos sin ganar, la causa de lo poco que propusieron ayer.
Puestos a medir las urgencias, que los locales se jugaran más no fue óbice para que el Compostela tomara el mando e hiciera más acto de presencia en área contraria. En el minuto 22, Davo Armengol mostró su rapidez de movimientos para desbaratar las intenciones de Pablo Durán a la altura del punto de penalti, pero no podría hacer lo mismo tres minutos después, cuando, tras “comerse” un centro raso de Rodri Escudero, el guardamete facilitaba que Pablo Durán entrara con el balón en la portería. Algo que sí está mostrando el Real Avilés con cierta frecuencia es su alta efectividad, pues últimamente convierte las escasas que genera. Así ocurrió en el minuto 34 con Sergio García y su lanzamiento con el exterior, desde la frontal y por la escuadra. Ahí se acabó el propósito para el que el técnico gallego, Rodri Veiga, venía especialmente predispuesto, el de mantener la portería intacta, lo que sólo consiguió una vez fuera de Galicia. Después, ante la falta de argumentos ofensivos en unos y otros, fue el turno para las concesiones defensivas en sendos saques de esquina mal contrarrestados. Al testarazo de Pablo Antas le siguió la volea con la zurda de Jorge Morcillo, válida para que el Real Avilés continúe, al menos, haciendo equilibrios sobre el alambre.
