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Judo

No hay dos sin tres para Verano

El maestro gijonés inicia su tercera etapa en Paraguay, que incluye trabajar con la base además de perfeccionar a los mejores del país

Jesús Verano.

Dicen que no hay dos sin tres. Y que a la tercera va la vencida. Se lo puede aplicar el maestro octavo dan de judo Jesús Verano, que a sus 62 años ha puesto rumbo hacia Paraguay, en lo que significará su tercera etapa en el país sudamericano. Verano desarrollará un servicio integral, trabajando con deportistas de elite de shiai (combate) y katas. El trabajo de tatami será físico, enfocado al judo de competición, pero también vinculado a la base, gracias a un proyecto de la Federación Internacional de Judo (FIJ) para potenciar la inclusión del judo en los colegios.

Es precisamente la FIJ quien ha dado el visto bueno al nuevo desembarco de Jesús Verano en Paraguay, tras petición del presidente de la Federación Paraguaya de Judo, Sergio Kanonnikoff. Ambos guardaron buena sintonía en el anterior periodo (enero 2019-marzo 2020), hasta que la pandemia hizo saltar por los aires la economía mundial. La primera etapa (2014-2016) se focalizó en la preparación de los Juegos Olímpicos de Río. Pero Jesús también tendrá funciones federativas, de despacho, y lo podrá compaginar con la impartición de cursos en Argentina y Brasil, federaciones con las que la Paraguaya mantiene estrecha colaboración.

El acuerdo inicial es para un año, con posibilidad de renovar con vistas a la cita olímpica de París 2024. El 4 de mayo ya está fijado el primer viaje, con invitación a Paraguay para el Campeonato Nacional de Judo de Argentina. Entre tanto, el gijonés vivirá en la residencia del Comité Olímpico de Paraguay, que también le proporcionará la manutención, y que preside Camilo Pérez-Moreira.

A Jesús Verano le ha dado tiempo para entablar amistades en el país paraguayo, algunas curiosas y con vínculo asturiano. El que fuera tres veces medalla de bronce en el Campeonato del Mundo de katas, Campeón de Europa y varias veces campeón de España en diferentes katas, guarda relación con el exjugador del Real Oviedo Ramón Ángel Hicks. El nexo es la música, en reuniones periódicas con un tercer amigo en común, Óscar Díaz, y su hijo. Por otro lado, dio clases personales de judo durante meses al hijo del presidente del Gobierno paraguayo, Mario Abdo Benítez, y al sobrino de este, a su vez hijo del popular productor musical Kike Santander.

En definitiva, se trata de una nueva etapa para este veterano deportista, juez internacional de kata y árbitro mundial. Verano cuenta con el apoyo de las federaciones Asturiana y Española en su nueva aventura, y del Comité Olímpico Español. Es más, sus presidentes, José Ramón Díaz Maseda, Juan Carlos Barcos y Alejandro Blanco, respectivamente, están entre sus valedores. Objetivo París. ¿Por qué no?

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