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Dos grandes promesas del deporte y el karate asturiano: Alejandro Catalán e Idaira López, oro y bronce en los campeonatos de España

El langreano destaca también como un estudiante de 10 mientras que la gijonesa ha evolucionado tras cuatro años entrenando con Lino Gómez Feito

Alejandro Catalán ejecuta una kata. Fernando Rodríguez

El asturiano Alejandro Catalán Carreira (La Felguera, 9 de julio de 2004) es una de las grandes promesas del kárate español, como demostró en el reciente Campeonato de Europa junior, en el que consiguió la medalla de oro por equipos en katas. Catalán, que ya fue oro europeo individual en 2021, le dedica muchas horas a su deporte, pero eso no le impide destacar en los estudios, hasta el punto de haber recibido el premio al mejor deportista español escolar, que concede el Consejo Superior de Deportes. Así que su futuro no puede ser más brillante, un chaval de 10 en el aula y también en el tatami.

Con 4 años, Alejandro Catalán ya empezó en el kárate, en el gimnasio Kando de La Felguera. “Quería practicar algún deporte y mis padres no quisieron mandarme a fútbol. Preferían algo que inculcara valores, disciplina y respeto, además de aprender a defenderme. Vieron que el kárate era el más adecuado. Probé y desde la primera clase me gustó”. Dos años después, en su primera competición, ya consiguió una medalla de bronce y con 8 se proclamó campeón de Asturias alevín.

Fernando Rodríguez Alejandro Catalán muerde la medalla

Con la tutela de su primer entrenador, Toni García, Catalán siguió acumulando títulos regionales y de la zona norte, “pero en los campeonatos de España me di cuenta de que no era suficiente con los estilos gensei ryu y shotokan, así que con 15 años empecé con el shito ryu. Decidí entrenar los fines de semana en uno de los clubes más prestigiosos, el Kumo Sport de Madrid, con el maestro Manuel Capetillo. Le dedicaba seis horas todos los sábados y cuatro los domingos. Así llegó la primera medalla en la liga nacional”.

El salto de calidad le permitió alcanzar su objetivo y, tras proclamarse campeón de España individual y por equipos, llegó la convocatoria para la selección española. Y en 2021 se proclamó campeón de Europa junior de katas. “Gané alguna medalla en kumite, que en Asturias se practica más, pero a mí siempre me gustaron más las katas, en las que España es una potencia mundial, junto con Japón y Turquía. Las katas son como una expresión de lo que sientes, de lo que eres”.

Su elección ha dado frutos y recientemente, en el Europeo junior celebrado en la República Checa, el equipo formado por Alejandro Catalán, Iván Martín y Alejandro Galán, con Izan López como reserva, se colgó la medalla de oro tras vencer a Italia en la final. Fue la guinda a un año perfecto para Catalán, distinguido por el CSD por la conjunción de sus resultados deportivos y académicos. Alejandro Catalán ha finalizado segundo de Bachiller con 9,8 de nota media y el próximo curso empezará a estudiar Ingeniería de Telecomunicaciones.

“Me defino como un soñador, pienso que con organización y trabajo, aplicando la cultura del esfuerzo, no hay nada imposible”, sentencia Catalán, que combina sus entrenamientos en Madrid con los del gimnasio Kongym de Sama, dirigido por Juan García. Borrado el kárate del programa de los próximos Juegos Olímpicos, el objetivo más próximo de Alejandro Catalán es el mundial sub-21 de 2024, donde espera optar al podio tanto en individual como por equipos, “la modalidad más vistosa”.

Idaira aprende rápido

Idaira López

El kárate apareció en la vida de Idaira López Méndez (Mieres, 1 de noviembre de 2006) porque no paraba quieta. “Con 4 años, mis padres me apuntaron porque era hiperactiva”, explica Idaira, que acaba de lograr la medalla de bronce en el Campeonato de Europa cadete, en kumite. Un éxito que ella atribuye a la decisión que tomó hace cuatro años.

“Empecé con el kárate en el Centro Deportivo Gijón, pero con 11 años quería seguir creciendo y me fui a Oviedo al gimnasio de Lino Gómez Feito, que es mi ídolo y un referente en España”, señala Idaira López, convencida de que tomó la decisión correcta: “Me encanta como ‘coach’, tiene a gente muy competitiva. Cogí mucho nivel y fui mejorando en las competiciones”.

Se proclamó campeona de España alevín e infantil y encabezó el ranking nacional cadete, lo que le abrió la puerta de la selección. En 2021, la gijonesa fue cuarta en el Europeo, una pequeña decepción que le llevó a dar ahora un paso adelante: “Me sirvió la experiencia del año pasado. Estuve muy concentrada y tenía claro que iba a por la medalla. Me dio mucha rabia perder en la semifinal”.

Lo próximo para ella será el Campeonato de Mundo en Turquía y más a largo plazo, a tres años vista, una carrera universitaria “relacionada con el deporte”, a ser posible en Madrid, donde seguir progresando como karateka: “Espero entrar en el CAR y entrenar con el seleccionador español, Iván Leal”.

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