Javier García Cuesta es uno de los primeros jugadores que puso el balonmano asturiano a nivel internacional. Lo hizo como jugador y posteriormente como entrenador, lo que le convierte en una de las referencias de este deporte en España.
–Ha recibido muchos homenajes, ¿es este especial?
–He tenido otros homenajes, pero este es diferente porque todos los jugadores internacionales asturianos esteremos ahí. También que la Familia Olímpica Asturiana se haya involucrado en esto. Es una pena que no se esté dando importancia porque no solo hay jugadores, hay entrenadores, árbitros, directivos, que han dedicado muchos años al balonmano y se merecen tener un homenaje.
–El balonmano en el que empezó y el actual poco tendrán que ver.
–La generación nuestra fue la que empezó a tomárselo más en serio tanto en los clubes como en la selección. Era una época en la que se decía que no se podía tomar agua mientras se entrenaba o que era malo entrenar mañana y tarde. Pero se empieza a ver partidos por la televisión, la selección hace más entrenamientos, competimos más internacionalmente. Nuestro juego se basaba en la portería, la defensa y el contraataque, pero fuimos evolucionando con Domingo Bárcenas y Juan de Dios Román. Los entrenadores empezaron a buscar nuevas situaciones de juego, en una palabra la mejora a la hora de tomar decisiones en el juego, que es en lo que ahora los jugadores son francamente buenos.
–¿A qué achaca esa evolución?
–Para mí todo empezó con la creación del ADO con motivo de los Juegos Olímpicos de Barcelona pero luego, aunque modificado, continuó y una de ellas, a mi juicio muy importante, fue la calidad de enseñanza que se ofrece en los estudios de INEF en toda España. El Comité Olímpico también ofrece master de mucha calidad y todo ello y con más de dinero surgen los entrenadores jóvenes que se atreven a desarrollar el deporte. Hay una serie de cosas en las que España ha sido pionera en el desarrollo del balonmano internacional. Y lo mismo pasa en otros deportes.
–Un hito fue la clasificación para Munich-72.
–Estábamos muy orgullosos de haber sido capaces de ganar la clasificación para los Juegos Olímpicos de Munich, Allí tuvimos muchas lesiones y también hay que reconocer que no estábamos preparados para competir a ese nivel e hicimos lo que pudimos, pero cogimos mucha experiencia.
–¿Cómo vivió el atentado terrorista que hubo en esos Juegos?
–No solo para mí sino para todos nosotros estar allí fue impresionante. Lo primero es el desfile inaugural, pero también me quedaron otras cosas. Del atentado nos enteramos al otro día por la mañana cuando nos dijeron que igual se suspendían los Juegos, recuerdo que nos dieron permiso para ir a la ciudad y volver a media tarde. Por la noche deciden que llevan a los terroristas al aeropuerto y allí es cuando intentan matarlos, pero fracasan y ellos se cargan a los atletas israelitas. Nos quedamos todos en «shock» y, aunque no estábamos cerca, sí lo vivimos allí.
–¿Qué otros recuerdos tiene?
–Cuando llegamos no había prácticamente seguridad. Pero tras el atentado todo cambió, solo se veía gente con ametralladoras por todos lados. De la organización me llamó mucho la atención que todos los transportes eran subterráneos, o la techumbre del estadio. Nos regalaron a todos una maquinilla de afeitar de dos hojas, era la primera vez que las veíamos.
–En la selección siempre hubo presencia asturiana.
–Todo se inicia con José Antonio Roncero. Estaba yo, Villamarín, luego llegaron Pepe Llaneza, Javi Meana, Vicente Moral, Chechu Villaldea ... son jugadores de distintas épocas que marcan una evolución en el equipo nacional. Asturias siempre ha sido uno de los puntos fuertes en el balonmano nacional.
Trayectoria
Lugar y fecha de nacimiento: Mieres, 20 abril de 1947.
Trayectoria como jugador: Codema, La Algodonera, La Salle Bilbao y Atlético de Madrid. Componente de la selección española (63 internacionalidades), fue olímpico en Munich-72.
Trayectoria posterior: Licenciado en INEF. Preparador físico del Atlético de Madrid de fútbol a las órdenes de Luis Aragonés. Campeón de Liga y Copa. Como entrenador dirigió al Teka Santander (campeón de Copa). Fue seleccionador de España, Portugal, Estados Unidos, Brasil y Egipto. Estuvo presente en los Juegos Olímpicos de Los Ángeles con Estados Unidos, en Barcelona-92 con España y en Atlanta-96 con Egipto. Se retira en 2018.