Rey del Angliru, príncipe del Everest: la increíble gesta de un sueco en la mítica cima del ciclismo asturiano

Andreas Olsson ascendió siete veces consecutivas, sin dormir, la cumbre de Riosa para superar el desnivel de la montaña más alta del mundo

Andreas Olsson, durante una de las ascensiones.

Andreas Olsson, durante una de las ascensiones. / FERNANDO DELGADO

Fernando Delgado

Fernando Delgado

El Angliru (Riosa)

El everesting es un desafío deportivo que consiste en acumular el desnivel positivo de los 8.848 metros de la montaña más alta del mundo ascendiendo repetidamente una misma cima en una sola sesión continua sin descansos prolongados y sin dormir.

El sueco Andreas Olsson, de 49 años, pasará a la historia por ser el primer deportista que superó el desnivel del Everest subiendo repetidamente el Angliru, hasta siete ocasiones consecutivas. Podría considerarse, por lo tanto, Rey del Angliru y Príncipe del Everest.

Este espigado y metódico deportista, de 1,97 metros de estatura y 80 kilogramos de peso, inició la primera ascensión de este gran reto el martes a las 6.15 horas desde La Puente Alta, en La Vega de Riosa, hasta la cima del Angliru. A las 10.12 comenzó la segunda, a las 13.48 la tercera, a las 18.08 la cuarta, a las 23.07 la quinta, a las 6.57 horas del miércoles la sexta y a las 13.14 horas la séptima.

Aunque el Angliru se ubica a 1.570 metros de altitud, el desnivel positivo desde La Puente Alta, en La Vega de Riosa, hasta la cima es de 1.255 metros con una longitud de 12,5 kilómetros y una pendiente máxima del 23,5% en La Cueña les Cabres.

Rey del Angliru, príncipe del Everest

Rey del Angliru, príncipe del Everest

Por lo tanto, con las siete ascensiones realizadas todavía le faltaban unos metros para superar el objetivo de los 8.848 del Everest. Este hecho obligó a Andreas Olsson a realizar una octava y última subida, a las 20.22 horas del miércoles, hasta Viapará para conseguir los 8.864 metros de desnivel positivo y alcanzar el reto marcado tras recorrer 181 kilómetros.

El tiempo total que empleó para superar el desafío este metódico sueco, que trabaja y vive en Noruega, fue de 38 horas y 35 minutos, con 6 horas y 44 minutos como tiempo total de paradas, y 31 horas y 51 minutos de tiempo real sobre la bicicleta. Hay que tener en cuenta que las paradas para avituallarse y reparar el material de la bicicleta entre cada ascensión oscilaron entre la media hora y la hora y media.

"El primer everesting que superé fue muy duro y pensé que no haría más, pero aprendí a a planificarme y a corregir errores para las siguientes ocasiones", manifiesta este meticuloso deportista que estudió hasta el mínimo detalle.

Esta hazaña del Angliru, casi sobrehumana, la superó en unas condiciones meteorológicas muy adversas, con intensa lluvia y niebla y llegando a los cero grados de temperatura en la cima durante la madrugada del martes al miércoles. "La primera ascensión fue para reconocimiento del terreno y conocer las exigencias físicas de cada zona de la subida", manifiesta, para añadir: "Se necesita una gran fortaleza mental y una actitud muy positiva para cumplir este gran reto. Elegí el Angliru por el gran desnivel que tiene".

El material utilizado está en consonancia con el reto. La bicicleta fue desarrollada en Italia por un mecánico que le hizo un cuadro de carbono a medida y los desarrollos utilizados combinan un plato de 46x30 dientes en la parte delantera con unos piñones de 10x45 en la parte trasera.

"Durante la tercera, cuarta y séptima ascensiones llovía mucho y el descenso fue muy peligroso", recuerda Olsson. LA NUEVA ESPAÑA le escoltó durante la cuarta subida, a última hora del martes, entre una densa niebla y con lluvia intensa. Comenzó el lento descenso a las 21 horas para llegar a La Puente Alta una hora después. Durante la bajada, Andreas frenaba de forma constante a la vez que daba pedales con un desarrollo muy elevado para no coger frío. "Como estaba muy mojado por la lluvia y por el sudor del esfuerzo, con una temperatura de cero grados, debía pedalear para no sufrir hipotermia y a la vez tener mucho cuidado para no quemar los frenos", explica.

Dos caídas

Cabe reseñar que se cayó en dos ocasiones, durante la quinta ascensión, en el descenso de la Cueña les Cabres donde el desnivel alcanza el 23,5%. El espigado ciclista todavía mantiene visibles una pequeña herida en su frente y algunas magulladuras en brazos y codos. También sufrieron daños el material de protección de las manos y el casco.

"El Angliru reúne todo para este gran reto, ya que posee una elevadísima dificultad técnica", sentencia. Andreas Olsson es el primer deportista que consigue esta excepcional hazaña: "el impacto personal es mucho más profundo que ningún dato que una máquina pueda medir. Además, para mí tiene un mayor significado por todos los excepcionales ciclistas que han subido esta cima y por otros a los que admiro profundamente por su humildad como Miguel Indurain y Mark Cavendish, con quien formé equipo virtual durante la pandemia para conseguir everesting en Zwift".

La Casona Angliru de turismo rural, en La Puente Alta, propiedad de Íñigo Prieto, otro gran apasionado del ciclismo, fue su base de operaciones desde el domingo hasta el viernes, que regresó a Noruega con el objetivo conseguido después de descorchar una botella de sidra para celebrarlo. Roberto Álvarez, alcalde de Riosa, le hizo entrega de un maillot con la figura de Chava Jiménez, primer ganador en la cima del Angliru en 1999. El sueco consiguió llegar al Everest a través del Angliru.

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