El derbi de la normalidad, el de la ilusión tras el covid, acabó en reparto de puntos en un Tartiere en ebullición (1-1). Oviedo y Sporting brindaron un espectáculo deportivo a la altura de las aficiones, en una jornada de gran ambiente en la capital asturiana y también en Gijón. La Asturias futbolera madrugó para vivir la jornada del derbi y se va a dormir con un empate. Lucas adelantó al equipo azul en la primera parte y Djuka igualó para el Sporting en el 83. La rivalidad se trasladó al césped, con un duelo vibrante entre vecinos que acabó con sensación amarga en el bando azul cuando ya rozaba el triunfo con las manos. El Sporting acabó aliviado tras una genialidad de Villalba que remató el ariete montenegrino y que impidió la cuarta victoria carbayona en los derbis.

La primera parte no dio tiempo para dormirse. Intensidad desde el minuto 0. Como en los últimos derbis, el Sporting apostó por mantener la posesión. El Oviedo, por la electricidad. Los locales formaron con la alineación esperada, con Mossa repitiendo en el once por el lesionado Cornud y Obeng de vuelta a la alineación tras su sanción. Brugman mantuvo su sitio por el lesionado Luismi. En el Sporting Valiente entró por Berrocal, Guille por Bogdan y Aitor por Gaspar. Y los rojiblancos entraron con brío al partido en los primeros instantes. Hubo dos serios avisos visitantes repelidos por Femenías. El primero, del pillo Villalba en el minuto 9 en un tiro fuera del área y segundos más tardes fue Aitor García el que probó al meta balear tras una internada por la izquierda. La balanza parecía inclinarse del lado rojiblanco pero el Oviedo despertó. Obeng tiró fuerte abajo y Mariño no falló. Guille Rosas se retiró lesionado en el Sportingn y Bogdan lo sustituyó. El equipo azul comenzó a ganar metros y posesión. Borja, siempre el mejor recurso azul, la pedía. Y Mossa se la dio con un bonito taconazo para que el canterano centrase con la zurda desde línea de fondo. En el segundo palo apareció Lucas para cazarla al vuelo y con un sutil toque de interior meter el 1-0. Era el minuto 28. Lucas, asistente de Diegui en el anterior derbi, asumió esta vez el papel de rematador.

El Tartiere era ya una fiesta y el Sporting menguó tras el gol. El conjunto de Gallego acumuló posesiones sin ningún peligro: exactamente igual que en el anterior duelo de máxima rivalidad en campo azul. El Oviedo estaba cómodo esperando su oportunidad y además jugó el balón con criterio. Solo Pedro Díaz, Aitor y Villalba daban la sensación de ofrecer algo diferente en el bando visitante. Djuka no tuvo ninguna oportunidad.

La segunda parte arrancó con una internada peligrosa del Sporting en la que no decidió bien Campuzano. El Oviedo respondió poco después con una buena volea de Viti que detuvo Mariño. El partido tenía ritmo. El Sporting, en desventaja, una marcha más, pero sin el necesario colmillo. Mantenía el equipo de Gallego la posesión ante un Oviedo muy cómodo esperando, en su salsa. Berto entró por Campuzano en el Sporting. Así pasaban los minutos. El equipo azul tuvo el 2-0 con un buen tiro de Obeng en el 65. Su disparo cruzado se fue fuera por poco. Bastón tuvo la sentencia solo cinco minutos después tras cazar un balón suelto en el área. Su zurdazo se marchó desviado por arriba. El Cuco movió el banquillo: Javi Mier y Sangalli entraron por Bastón y Viti. El Sporting tuvo la más clara para empatar tras una buena llegada de Aitor por la derecha. Bertó, atento en el segundo palo, no fue capaz de empujarla entre los palos. Sustazo para los azules.

El partido llegaba a su fase final y apareció Djuka para el Sporting. Villalba filtró un gran pase a la espalda de los centrales y el montenegrino decidió con un pase sutil. 1-1 a falta de 7 largos minutos. Pombo entró por Brugman en el bando azul, que estaba solo con un delantero. Nacho Méndez y Berrocal entraron por Valiente y Pedro Díaz en el bando roijblanco. Quedaban cinco minutos de infarto. Pombo tuvo una buena ocasión en un gran disparo desde la frontal. El gol de la victoria podía caer en cualquier lado, pero no llegó. Tras varios acercamientos de los dos equipos el derbi murió en tablas y con reparto de puntos tras un espectáculo deportivo de altura.