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Pablo González

En territorio comanche

Pablo González

La opinión del día sobre el Sporting: Ni crimen ni castigo

Gallego está a la espera de que Javi Rico le traiga un delantero bueno, bonito y barato

David Gallego, en un entrenamiento con el Sporting

En el planeta fútbol ni hay crimen, ni hay castigo. Y si lo hay, no hay mejor solución que llamar a los expertos en generar cortinas de humo. El Sporting no es ajeno a todo esto, aunque hay aspectos en los que se queda como Javier Cámara y Candela Peña en “Torremolinos 73”: produciendo porno amateur del malo. Ahí está su gestión del “evento Sporting”. Pero el tiempo lo cura (casi) todo y ya nadie se acuerda de lo que pasó ni de que aún no se ha escuchado la versión de lo ocurrido de boca de los protagonistas de la historia.

La preocupación de la hinchada se centra ahora en saber si los que cayeron contagiados volverán a la titularidad ante el Cartagena. Si hay que ser crédulos por el bien del objetivo colectivo, en Castellón los que recibieron una buena dosis de jarabe de banquillo lo fueron por criterios técnicos y no por cuestiones estético-disciplinarias. Primer gran marronazo para Gallego desde que cayó (de pie) en Gijón.

El segundo será ver cómo gestiona la ausencia de recambio para Djuka tras la salida de Álvaro Vázquez. Javi Rico va capeando a su manera las minas submarinas que le quedaron en herencia, como por ejemplo ese contrato con pago de traspaso incluido llamado Netfali. Aún queda tiempo para fichar. Las órdenes son que el que llegue sea bueno, bonito y barato por eso del exhausto límite salarial. Luego la realidad mostrará si es así o si el elegido engrosará la larga lista de crímenes sin castigo tan habituales por estos andurriales.

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