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Pablo González

En territorio comanche

Pablo González

La opinión del día sobre el Sporting y el Oviedo: Cogersa y un expediente X

La nueva jornada se pone en marcha una vez apagados los ecos del derbi y del lío en la cantera azul

Escudo del Real Oviedo y del Sporting LNE

Apagados los ecos del derbi, ya en Cogersa los restos de la fiesta y los palos de la discordia a buen recaudo en sede policial, queda tiempo para poco más que echarle un ojo a lo que les viene por delante esta jornada a Oviedo y Sporting.

El Alcorcón, desde hace unas semanas sin Anquela a los mandos, pasará por Gijón para medir si los cimientos del proyecto rojiblanco se mantienen firmes. La fortaleza de los de Gallego sigue siendo El Molinón, y medirse con el colista trae consigo una obligación añadida de ganar sí o sí.

Mientras, al Oviedo le toca visita a Anoeta, nombre de toda la vida del campo donostiarra y ahora alquilado, por eso de la pasta, a uno de esos filiales de los de antes, de los diseñados para formar futbolistas destinados al primer equipo y no como los de ahora, que acaban siendo un contenedor de jugadores más cercanos a la treintena que a la veintena con el único objetivo de conservar la categoría. Lo que viene siendo el equipo B que poco le sirve al equipo A salvo para el partidillo de los jueves.

Son las cosas del nuevo “fúrgol”, donde los filiales son entes prácticamente al margen y que en muchos casos se convierten en tapón del tercer equipo, el juvenil de toda la vida. Es en este escalafón donde se produce una de las grandes cribas en la carrera de los futbolistas: es la bisagra entre tener una oportunidad lo más cercana posible al fútbol profesional o dedicarse a otros asuntos.

Por eso sorprende el lío que se ha producido en el microcosmos azul, donde un día dimite el técnico del juvenil por unas supuestas presiones para que juegue este o aquel y un par de semanas después regresa como si nada. Expedientes X que se producen en el fútbol y en la vida que nunca se aclaran del todo y que suelen dejar cicatrices.

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