La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Pablo González

En territorio comanche

Pablo González

La opinión sobre la crisis del Sporting (IV): El trabayu de Abelardo

El aviso del Pitu sobre la necesidad de bajar al barro para evitar el descenso, sus mensajes al vestuario y el papel de Javi Rico en el nuevo Sporting

Por la izquierda, Javi Rico y Abelardo, sobre el césped de El Molinón JUAN PLAZA

Trabayu, trabayu y trabayu y pelear cada balón como si fuera la final de la Liga de Campeones. Esta es la fórmula dada por Abelardo para sacar al Sporting de uno de sus peores momentos deportivos de la historia en su retorno al club rojiblanco. El tercer entrenador de la temporada se dejó ver feliz e ilusionado en su presentación en la sala de prensa de El Molinón.

Más serio era el semblante de Javi Rico, que despejó la pregunta sobre la salida de Noé Calleja, en un tiempo ya muy lejano su mano derecha, y tampoco profundizó mucho sobre su futuro. Todo pasa por cómo acabarán las cuatro finales a las que se enfrentan el Pitu y sus muchachos, a los que dejó un recado entre sonrisa y sonrisa. “Tenemos un privilegio de profesión”, “hay que tener compromiso, actitud, disciplina máxima y bajar al barro”… fueron algunos de los mensajes abelardianos hacia el vestuario.

Esto abre las apuestas sobre si habrá revolución en el once de cara al partido de Huesca y si alguna de las vacas sagradas, que no consagradas, acabarán chupando banquillo en busca de la necesaria reacción. Por lo demás, Abelardo transformó el clásico “partido a partido” en el nuevo mantra rojiblanco de aquí al final de curso: “entrenamiento a entrenamiento”.

Luego, y una vez conquistado el pírrico éxito de la permanencia, tocará, siempre según Abelardo, reflexionar para que esta historia no se vuelva a repetir. Pero ahora, trabayu, trabayu y trabayu, oisti guaje.

Compartir el artículo

stats