En territorio comanche

La opinión sobre el Sporting y el Oviedo: Djuka y las pulgas

A perro con las costillas a la vista todo son pulgas. Esto es lo que le ocurre al Sporting de Orlegi. Un día agradecen los servicios prestados a herr doktor Maestro y a la vuelta de la esquina va la estrella del proyecto y ¿dónde se lesiona?; mientras, Cervera busca recuperar la solvencia defensiva y lograr marcar un día de estos dos goles en el mismo partido

Ramírez conversa con Djuka en Mareo.

Ramírez conversa con Djuka en Mareo. / Ángel González

Pablo González

Pablo González

Ya saben, amiguinos y amiguinas, a perro con las costillas a la vista todo son pulgas. Esto es lo que le ocurre al Sporting de Orlegi. Un día agradecen los servicios prestados a herr doktor Maestro, experto del mundo mundial en temas de rodilla, y a la vuelta de la esquina va la estrella del proyecto y ¿dónde se lesiona? Las cosas del directo, que diría aquel. Y es que, como contó LA NUEVA ESPAÑA, Djuka tendrá que pasar por el quirófano para resolver un problemilla en su rodilla que parecía un esguince, pero el asunto se complicó y habrá de someterse al bisturí. Todo ello justo cuando el balcánico había vuelto a ver puerta y el Sporting de MAR, con #hashtag o sin él, se va a jugar el cocido en las próximas fechas.

El técnico canario tendrá que tirar de inventiva ahora que anda muy, pero que muy justo de efectivos en vanguardia. Aunque los problemas de este Sporting ahora pasan por la solvencia defensiva, en la semana en la que rendirá visita al Burgos de un renacido Gaspar Campos.

Mientras, a 28 kilómetros el problema es el contrario. El equipo del Almirante Cervera, el protegido de David Vidal, vive gracias a su entramado defensivo, pero se le funden los plomos cuando le toca ver puerta. De ahí que siga sin conocer cómo es la sensación de marcar dos o más goles en un mismo partido. Un problema que el Oviedo ya viene arrastrando desde la pretemporada, que ya es decir. Por lo demás, el «caso Negreira» está dejando tardes de gloria. La última es que han asaltado la casa de la jueza que lleva el tema. Seguro que es otra coincidencia, ¿oyisti, güey?

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