La opinión sobre el Sporting y el Oviedo: La Copa, ese marrón que mola tanto

Vuelve la Copa. El primero de los grandes de la madreñina «furgolística» en estrenarse será el Sporting, al que le toca visitar al Numancia, no hace mucho un clásico de Segunda División que tuvo sus mayores momentos de gloria cuando amargó a más de uno en su paso por Primera. Para los equipos profesionales son partidos que suponen un día más en la oficina, lo que alguna que otra vez suele aprovechar el bueno de David para darle un buen susto a abusón de Goliat. Ni para el Sporting ni para los sorianos el torneo del K.O. es su prioridad, que nadie se engañe.

Pero una mala tarde puede generar un mal rollito si los rojiblancos no son capaces de sacar la eliminatoria adelante aunque sea de aquella manera. Se anuncian estrenos y novedades en el once de Albés, como no podía ser de otra manera. Veremos si la unidad B, C o D cumple y demuestra que las categorías están para algo. Por el contrario, para el equipo chico la visita de clubes como el rojiblanco supone una buena inyección de «uros» por la vía de la taquilla y recordar tiempos mejores.

Por su parte, el Oviedo se reencontrará con el Ávila, con el que compitió en aquellos años del barro de los que todos se acuerdan pero que nadie quiere volver a repetir. Más de lo mismo. Partido trampa y tal y tal. En el caso de los azules, puede que sirva para ver en acción por primera vez al deseado «Toro» Viñas, del que todos esperan que vuelva a ser el que fue antes de romperse el tendón de Aquiles, una lesión nada fácil para un deportista.

Por lo demás, y en lo que viene siendo ahí fuera, más allá del Pajares, los cerebros privilegiados siguen dándole vueltas al boicot del Real Madrid a la fiesta del Balón de Oro. Hay teorías de la conspiración para todos los gustos, así que, amiguinas y amiguinos, elijan la que deseen, que en estos tiempos vale todo, y el que no estuvo de fiesta con Errejón es un aburrido, ¿oyisti, güey?

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