Puerto Real, (Cádiz)

Los problemas del sector industrial del motor en España se agravan con el cierre de la planta de componentes para la automoción que la multinacional estadounidense Delphi tiene en la localidad gaditana de Puerto Real, que dejará a unos 1.500 trabajadores en la calle. Según anunció ayer la propia empresa, después de un análisis «exhaustivo» de la situación financiera y legal del negocio se ve «obligada» a cerrar la fábrica. Ante esta situación, la Junta de Andalucía aseguró que actuará «en defensa» del empleo ante el «gravísimo» impacto que supondrá para la localidad tantos despidos.

Delphi Automotive Systems España informó a los representantes laborales de su planta en Puerto Real del cierre de la fábrica. Luego aseguró en un comunicado que la empresa ha incurrido en pérdidas operativas significativas durante los últimos cinco años por un importe total de 150 millones de euros, además de sufrir «altos costes» y ser «incapaz» de atraer nuevos contratos de negocios «de manera competitiva».

Además, los productos fabricados en la planta -direcciones, suspensiones y rodamientos- se identifican como líneas de producto «no esenciales», dentro de la gama de productos de la casa matriz. Así, Delphi «no puede justificar» proveer más apoyo financiero para las líneas de producto «no esenciales» que continúan generando pérdidas.

Ante esta situación, la Junta de Andalucía aseguró que actuará en defensa de los puestos de trabajo desde el diálogo permanente con los representantes sindicales de la fábrica, ya que, según el Gobierno autonómico, el cierre supondrá un «gravísimo» impacto tanto por la importante afectación a los puestos de trabajo, directos o indirectos, como en la economía de los municipios de la zona.

Asimismo, la Junta advierte que de acuerdo con la legalidad vigente exigirá a la empresa «un comportamiento ajustado» a la misma, garantizando el respeto a los derechos que la ley atribuye a los trabajadores, así como el cumplimiento de los compromisos suscritos con los mismos.

El comité de empresa de la planta gaditana ha convocado una manifestación para el próximo miércoles en Cádiz, para hacerse oír, y ha pedido a los trabajadores que «ocupen» las instalaciones, permanezcan en sus puestos y cumplan sus turnos, incluyendo los fines de semana y los días festivos, para que «siempre haya alguien en la fábrica».