La International Petroleum Investment Company (IPIC), compañía estatal del emirato de Abu Dhabi, se hizo ayer con el 2 por ciento de Energías de Portugal (EDP), que en España controla a la asturiana Hidroeléctrica del Cantábrico, con la que firmó un acuerdo para cooperar en las áreas de la electricidad y el gas.

Tras el cierre de esta operación, la firma árabe posee más de 73 millones de títulos, que representan el 2 por ciento del capital social y derechos de voto en EDP, en cuyo accionariado figuran la eléctrica española Iberdrola y Cajastur, con el 5 por ciento cada una.

Esta colaboración buscará crear oportunidades de desarrollo de proyectos comunes para producción de energía a partir de fuentes convencionales y renovables en la península Ibérica, Oriente Medio, norte de África y otras áreas de Asia. La eléctrica lusa afirma que este acuerdo de principios se encuentra «integralmente alineado» con el plan de EDP de constituir alianzas estratégicas con socios que creen «valor a través de la promoción de oportunidades para crecer».