Oviedo, J. L. SALINAS

El euribor, el indicador al que se conceden la mayoría de las hipotecas en España, cerró el mes de mayo al 4,994 por ciento. La tasa se quedó a dos décimas de su máximo histórico, 5,249 por ciento, que consiguió en el mes de agosto del año 2000. Con estos incrementos, quienes tengan contratada una hipoteca de unos 100.000 euros han visto cómo en los dos últimos años su cuota se ha incrementado en un 25 por ciento. Es decir, en la actualidad pagan de media unos 123 euros más que hace dos años.

En concreto, en mayo de 2006 el euribor estaba al 3,308 por ciento, 1,69 puntos por debajo que ahora, de esta manera un asturiano que tuviera contratada una hipoteca de 100.000 euros a 25 años y con un diferencial del 0,50 sobre el euribor estaba pagando una cuota de 490,30 euros. Pero, en la actualidad, con el alza del tipo pasará a pagar 613,49 euros. Así, de forma anual, abonará cerca de 1.500 euros más por su hipoteca debido al alza del tipo.

El repunte registrado en mayo confirma la tendencia al alza del indicador, que encadena cuatro meses consecutivos de subidas. El índice subió ayer por noveno día consecutivo, y situó su tasa diaria en el 5,097 por ciento, lo que colocó la correspondiente al mes de mayo rozando el 5 por ciento. Esta subida afectará a las hipotecas que se revisen en los próximos días, con una subida en su cuota mensual de cerca de 50 euros.

El euribor refleja las previsiones sobre la situación en la que se situarán los tipos de interés en la eurozona dentro de un año, y suele subir cuando las condiciones económicas permiten prever un alza de tipos por parte del Banco Central Europeo (BCE). Aunque los analistas no descartan totalmente que la entidad financiera pueda bajar los tipos de interés en la eurozona antes de fin de año, la prioridad del regulador europeo continúa siendo mantener la inflación en el 2 por ciento, tal y como reiteró ayer su presidente, Jean-Claude Trichet. «Mis colegas en el consejo de gobierno, Juergen Stark y Axel Weber y yo estamos preocupados por los actuales y elevados niveles de precios», declaró Trichet, que agregó que hay que ser «cautelosos», ya que es necesario evitar que el «shock» de los precios de alimentos y crudo se traslade a otros bienes y a los salarios.

Las últimas estadísticas divulgadas por el Instituto Nacional de Estadística (INE) reflejan una acusada caída en la venta de viviendas, sobre todo, en la de pisos usados, y en la demanda de hipotecas. El Banco de España corrobora que las entidades financieras están endureciendo las condiciones de los préstamos a las familias, reduciendo el dinero prestado respecto al valor de las viviendas y exigiendo mayores garantías.