Oviedo, J. L. SALINAS

«El sistema financiero es capaz cada vez de crear mayores turbulencias económicas, pero no por culpa del liberalismo, porque no hay un sistema que esté más regulado que el financiero». Son palabras del economista asturiano Manuel Sarachaga que ayer presentó su último libro «¿Dónde está mi dinero?» en el Club Prensa Asturiana de LA NUEVA ESPAÑA. El economista aborda en su obra las causas de los ciclos económicos bajos. «Las crisis son injustas porque siempre hay sectores que salen perjudicados, la economía no crece para todos igual y no todos salimos igual de las crisis», señaló el autor.

Para Manuel Sarachaga, la economía «no es un estado de ánimo». Así que «en la actual situación de recesión no estamos atravesando por graves problemas de confianza como aseguran algunos». A juicio del economista asturiano «no hay duda de que la crisis la ha creado el sistema financiero, y está claro que lo que se hace mal en un país como Estados Unidos acaba repercutiendo en todos los demás».

En el acto también participaron el catedrático de Hacienda Pública, Carlos Monasterio; el decano de la Facultad de Económicas de la Universidad de Oviedo, Francisco González; el gerente de la editorial Ménsula Ediciones, Sergio Ríos, y Pedro Herrero, representante de la Asociación de Diplomados y Estudiantes de Gestión y Administración de Empresas (Adegapa). Carlos Monasterio afirmó que «gran parte de la culpa de la situación es que se pasó de una temporada de tipos de interés muy altos a otro período en los que estaban bajos».

Para el catedrático de Hacienda Pública «si en la anterior crisis, la de 1993, alguien quería comprar un piso, tenía que enfrentarse a tipos de hasta el 15 por ciento y plazos de hasta 20 años, algo que ahora nos parece imposible, pero es que en aquella época los precios eran más asequibles». Monasterio criticó también medidas como la devolución fiscal de 400 euros o el plan de obras locales que puso en marcha recientemente el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero. «Hay que definir prioridades y éstas deberían de ser proteger a los desempleados e impulsar la ley de Dependencia que puede ser un buen yacimiento de empleo», señaló.

Francisco González explicó que «desde 1970 se han producido 112 crisis financieras en 93 países que consumieron de promedio un 12,8 del PIB», y señaló que «si hay entidades bancarias insolventes, hay que actuar de forma rápida».