Oviedo, J. C.

El acuerdo alcanzado ayer entre el presidente del Gobierno y el jefe de la oposición sobre la reforma del sector financiero y la reestructuración de las cajas puede allanar los últimos vestigios de resistencia a la anexión de la caja manchega CCM por la asturiana Cajastur.

El compromiso de Mariano Rajoy, presidente del PP, y del jefe del Ejecutivo, el socialista José Luis Rodríguez Zapatero, para acelerar las fusiones y concentración de las cajas, incluidas las suprarregionales, permite vislumbrar, de ser consecuentes ambos partidos con este compromiso, que el PP castellano-manchego, muy crítico con la operación de Cajastur, renuncie a vetar la integración cuando en junio se vote en la asamblea de CCM.

El presidente asturiano, Vicente Álvarez Areces, afirmó ayer que en las cajas, como en el resto del sistema financiero, hay un objetivo de «concentración» y que para hacerlo posible no se deben «bloquear» los procesos de unión«necesarios».

El pacto abre la puerta, además, al cambio normativo que permitirá dar derechos políticos a las cuotas participativas que emitan aquellas cajas que deseen reforzar su capital por esta vía. Las cuotas ya permiten la entrada de inversores privados en las cajas, pero hasta ahora sin reconocerles derecho de voto ni de elección. Rajoy y Zapatero asumen también el propósito de reducir la presencia pública en estas entidades.

El acuerdo pasa por acelerar a su vez el proceso de reordenación, en concreto de aquellas fusiones que vayan a precisar recursos públicos por la vía del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), y cuya disponibilidad está prevista (y autorizada por la UE) sólo hasta el 30 de junio, salvo que se negocie prórroga. La voluntad expresada ayer es que las integraciones de cajas no se demoren más de esa fecha.

Esta cautela no afecta a los dos proyectos en los que está implicada Cajastur. Porque ni la toma de control de CCM precisará de recursos del FROB (sí del Fondo de Garantía de Depósitos, que no es dinero público) ni se prevé que reclame ayudas públicas una eventual fusión «virtual» posterior, ahora en estudio.