Oviedo

La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) ha mejorado sus previsiones económicas para España, aunque con matices. Por un lado, el organismo ha revisado al alza sus previsiones económicas del país, aunque su corrección es muy pequeña si se compara con la realizada al alza para la mayor parte de los países de la zona euro. Según sus cálculos, el producto interior bruto (PIB) español caerá en 2010 menos de lo esperado con un recorte del 0,2%, cuando en noviembre auguraba un retroceso del 0,3%, un porcentaje que aún maneja el Gobierno. Por otro lado, el organismo lanzó un mensaje el Gobierno español y aseguró que las reformas que quedan pendientes en el sistema de pensiones y el mercado laboral son ahora más «urgentes» que nunca.

Para el próximo ejercicio, los cálculos no cambian, pese a la puesta en marcha de las nuevas medidas contra el déficit, ya que la OCDE mantiene que la economía española volverá a crecer tras dos años de contracción, con un repunte del 0,9%. También el paro bajará en 2011 más de lo que esperaba en noviembre. Así, en lugar de pasar del 19,3% al 19% entre 2010 y 2011 que calculaba a finales del pasado año, ahora el organismo estima ahora que la tasa de desempleo cerrará este ejercicio en el 19,1% y caerá 18,3% el próximo.

La razón que explica la mejora está en la reactivación del consumo y en el efecto arrastre que tendrá una recuperación mundial más rápida de lo previsto en las exportaciones. Sin embargo, el secretario general de la OCDE, Ángel Gurría, advirtió en contra de optar por la complacencia, ya que las reformas que desde hace años viene aconsejando a España, en particular la de su sistema de pensiones y la del mercado laboral, son ahora «urgentes» por el contexto económico. «No estamos poniendo en la mesa nada que no hayamos estado mencionando los años anteriores, pero sí la urgencia con las que se tienen que abordar», explicó Gurría.

Según las revisadas proyecciones de la OCDE, gracias a las últimas medidas anunciadas por el Gobierno central el déficit de España pasará del 11,2% al 9,4% a final de año, una décima más de lo que espera el Ejecutivo. Después, cerrará 2011 en el 6,9%, frente al 8,8% que recogen las últimas previsiones del Gabinete de José Luis Rodríguez Zapatero, aunque estas estimaciones deberán ser actualizadas con el previsible impacto de las nuevas medidas de ajuste del gasto público anunciadas a principios de mes.