El consejo de administración de Caixa Girona ha aprobado hoy la fusión por absorción con La Caixa que ambas entidades estaban planteando a sus órganos de decisión, según ha anunciado hoy el presidente de la entidad gerundense, Manel Serra.
Serra, quien ha interrumpido el consejo de administración que se celebra hoy en Girona, ha expresado su "satisfacción de anunciar que se ha acordado por unanimidad el inicio de los trámites, que si todo va bien, pueden llevar a la fusión por absorción de Caixa Girona por La Caixa".
El presidente de la entidad ha detallado que "el acuerdo también lleva implícita la creación de un consejo territorial formado por personas vinculadas al ámbito de las comarcas gerundenses que representará a la nueva entidad, el seguimiento de la actividad financiera y la gestión de la Obra Social".
La decisión de Caixa Girona se produce después de que el pasado mes de marzo la entidad rechazase, en el último momento y sin razón aparente, fusionarse con las cajas que ahora han integrado Unnim -Terrassa, Sabadell y Manlleu-.
Serra ha anunciado esto después de que el consejo de hoy cambiase el orden del día y diese prioridad al orden del día extraordinario por delante del ordinario, que todavía se está debatiendo en este momento.
"Es una muy buena opción para las dos entidades y prestaremos mejor servicio a todos los clientes de Caixa Girona y esto supondrá mantener la obra social, que se mantendrá en los volúmenes de los últimos años", ha valorado Serra en una breve declaración ante los periodistas.
Con esta decisión, el mapa de cajas de ahorros en Cataluña queda prácticamente cerrado a la espera de cómo evolucionen las dos fusiones frías -SIP- cuyas negociaciones tienen abiertas Caixa Penedès y Caixa Laietana con otras cajas de fuera de Cataluña.
La fusión hará que La Caixa controle un 60% de cuota de mercado en Girona, una de la zonas más ricas de España, y que los trabajadores de Caixa Girona sean asimilados a los de La Caixa, lo que les supondrá una subida salarial del 27%, según las fuentes financieras consultadas.
Este hecho ha sido determinante para que los representantes sindicales en el consejo de administración hayan votado a favor de la fusión, a pesar que no apoyaron integrarse en Unnim.
En cambio, no se ha explicado por qué los consejeros que tradicionalmente se opusieron a la operación, vinculados a CiU y ERC, ahora han dado su visto bueno a una absorción por parte de La Caixa.
La Caixa es la primera caja de España y Caixa Girona era la octava caja catalana, con un total de 7.814 millones de euros por volumen de activos a datos de junio del 2009, lo que supone el 3% de los activos de La Caixa.
El principal problema que deberán afrontar ambas entidades es qué hacer con los 250 trabajadores de los servicios centrales de Caixa Girona que trabajan en la sede central, principal excedente laboral de la operación.
Una vez aprobado hoy el inicio del proceso de fusión, ambas entidades deben elaborar el proyecto de fusión que deberá ser confirmado por los respectivos Consejos de Administración.
"El calendario de la fusión debe concluir con la ratificación de las respectivas Asambleas Generales", advierte Caixa Girona en un comunicado.
En los próximos días se sabrán más detalles, cuando La Caixa y Caixa Girona negocien con los sindicatos el ajuste de plantilla resultante de la fusión, qué cierre de oficinas supone y cómo se implementa la absorción.
El director general de La Caixa, Juan María Nin, aseguró este fin de semana que el proyecto de fusión de la primera caja española con Caixa Girona "es una buena operación para Cataluña, una buena operación para La Caixa y una excelente operación para Girona".
