Primer ajuste

A principios de año, y en cumplimiento del protocolo de déficit excesivo, España remitió a Bruselas un plan de estabilidad y crecimiento en el que se comprometía a reducir el gasto público en 50.000 millones de euros entre 2010 y 2013.

Segundo ajuste

A raíz de la crisis de la deuda soberana y de los ataques al euro, el 9 de mayo los países de la moneda única se comprometieron a acelerar los ajustes. El Gobierno español anunció un severo plan para ahorrar 15.000 millones en dos años, que incluyó la rebaja del salario de los funcionarios, la congelación de pensiones y otros recortes sociales y de inversión pública.

Tercer ajuste

La Comisión Europea cree que el plan español va en la dirección correcta y considera suficientes las medidas para 2010. En cambio, se pide más concreción para 2011 y un ahorro extra que puede suponer 7.500 millones de euros.