Oviedo, José Luis SALINAS

La deducción del impuesto de la renta (IRPF) por la compra de vivienda habitual acabará el sábado para aquellos contribuyentes con rentas medias y altas que compren piso a partir de ese día. La medida fue anunciada hace ya un año por el presidente José Luis Rodríguez Zapatero en 2009 como una de las reformas para hacer frente a la crisis. Se esperaba que el fin de la deducción impulsara la venta de pisos durante las últimas semanas del año, pero, lejos de ser así, el mercado inmobiliario ha prolongado su caída según indican las últimas estadísticas y las impresiones de los agentes inmobiliarios que operan en la región. En las siguientes líneas se explican algunas de las principales cuestiones relativas a este ajuste fiscal.

l ¿Qué pasa con quienes ya disfrutan la deducción? La nueva restricción no afectará a quienes hayan adquirido ya vivienda y estén pagando una hipoteca. Los cambios no se aplicarán con carácter retroactivo, sino para las compras formalizadas a partir del próximo sábado. Según los últimos cálculos, hay unos 150.000 asturianos que se benefician de esta deducción. Nada cambiará para ellos a partir del 1 de enero y podrán seguir aprovechándose del incentivo fiscal. Independientemente de su nivel de renta, estos contribuyentes disfrutan de una desgravación anual que en el mejor de los casos llega a los 1.356 euros, equivalentes al 15% del límite máximo de los gastos deducibles (9.040 euros).

l ¿A quién afecta? Aquellos que adquieran un piso desde el sábado y tengan unos ingresos superiores a los 24.107,2 euros anuales (medidos por la base imponible del IRPF) no tendrán deducción alguna. Para quienes tengan unos ingresos anuales de 17.107,2 a 24.107,2 la cantidad que se puede deducir irá reduciéndose de forma progresiva. En cambio, el Gobierno ha optado por mantener la ayuda para quienes tengan unas rentas más modestas. De esta forma, si los ingresos son menores de los 17.107,2 euros, no habrá variaciones, según explica el asturiano Jesús Sanmartín, presidente del Registro de Economistas de Asesores Fiscales (REAF) en España. Estos contribuyentes podrán seguir disfrutando de la deducción máxima del 15% sobre los gastos que son deducibles.

l ¿Qué ocurre con quienes hayan comprado piso nuevo durante 2010, pero sin que las obras hayan acabado? Sanmartín explica que en este caso, para poder aprovechar la deducción, es necesario tener un contrato de compra firmado y haber realizado ya, al menos, un pago. «No vale con dar una señal, hace falta algo más», sostiene el experto fiscal.

l ¿Cómo afectan los cambios en el caso de una pareja en el que uno de los miembros no llega a los 24.107,2 euros, pero el otro los sobrepasa? En este supuesto, Sanmartín asegura que si presentan la declaración de la renta por separado, aquel que no sobrepase la citada cantidad podrá seguir beneficiándose de la deducción, pero dividiendo por dos los gastos deducibles. En cambio, quien supere el nivel de ingresos no podrá seguir aprovechándola. En otro ejemplo, el de un matrimonio en el que cada uno de los cónyuges ingresa 17.000 euros o menos al año, ambos mantendrán el derecho a la desgravación en sus términos actuales. También puede darse el caso de una pareja en el que uno de los cónyuges disfrute de la deducción completa y el otro se beneficie de otra reducida, siempre que hagan su declaración de la renta individual.

l ¿Qué ocurrirá con las cuentas de vivienda desde el 1 de enero? A lo largo del próximo ejercicio fiscal la deducción de las cuentas de ahorro vivienda tan sólo serán aplicables a los contribuyentes cuya base imponible sea inferior a los 24.107,2 euros anuales. Sanmartín asegura: «No tiene sentido que el que perciba una cantidad superior a ésta mantenga la cuenta abierta», ya que no podrá beneficiarse de la deducción.

l ¿Ha impulsado las ventas esta medida? Los agentes inmobiliarios aseguran que los efectos del fin de la deducción sobre las compraventas ha sido escaso. Y aseguran que el incremento fue mayor cuando las semanas antes de que entrara en vigor la subida del IVA el pasado verano.