Oviedo / Madrid,

M. MARTÍNEZ / Agencias

El presidente de la patronal CEOE, Juan Rosell, afirmó ayer que con la nueva reforma laboral «el Gobierno ha cogido el toro por los cuernos», y que «va en la buena dirección» porque ayudará a generar empleo. ¿Cuándo? «Cuando los vientos de la economía sean más favorables», afirmó. Los empresarios van a buscar apoyos para que varias de sus propuestas se incluyan en el texto durante su tramitación parlamentaria. Por ejemplo, fórmulas que permitan combinar el decreto del Gobierno y el pacto de negociación colectiva suscrito con los sindicatos. La patronal también plantea que la mutuas puedan dar altas por enfermedad y que se modifique la ley de huelga para blindar los servicios públicos.

Juan Rosell alabó la reforma laboral porque «concreta las causas objetivas» para que una empresa pueda abordar una reestructuración «si las cosas van mal». «Hasta ahora no había más alternativa que despedir», comentó. Eso sí, Rosell añadió que además del despido y la posibilidad de bajar salarios o suspender el convenio, a los empresarios «nos hubiera gustado que la reforma incluyera medidas mucho más concretas. Pero aún así va en la buena dirección, porque nos acerca a la legislación de los grandes países europeos, de los que estábamos muy alejados», afirmó Rosell.

El presidente de CEOE negó de manera tajante que «todas las empresas españolas vayan a despedir con los 20 días de indemnización». Según Rosell, «los empresarios no tienen en la cabeza despedir, sino contratar», y lo que se consigue con esta reforma laboral es «dar un paso hacia la realidad y la legalidad absoluta», porque lo que «no es razonable es pensar que todos los empresarios lo hacen tan mal que se justifica que el 88% de los despidos en 2007 fueran improcedentes, y el 66% en 2011. Se utilizaba el despido exprés porque no había otra alternativa. Eso es una anomalía total. Y ahora se aclaran los despidos procedentes y lógicos: por pérdidas y por caídas de ventas durante varios meses consecutivos».

Ante la posibilidad de que las grandes compañías del Ibex puedan utilizar estas caídas para proceder a despidos y ajustar sus plantillas, Rosell afirmó que «ninguna de las compañías del Ibex están en pérdidas y será difícil que alguna pueda hacer despidos procedentes».

El presidente de la CEOE se refirió también a las bonificaciones que contempla la reforma laboral para realizar algunas contrataciones, especialmente para los jóvenes y también las que pueden obtener por contratar a parados que están cobrando prestaciones. «A nosotros no nos gustan las bonificaciones, pero están ahí. Hay muchas personas mayores en el desempleo, igual que jóvenes. España es de los países de la UE en los que más se bonifica la contratación. Quizá no sea del todo justo, pero tampoco es injusto. El problema es que no sabemos qué hacer para dar confianza y crear empleo. ¿Algunos podrán ser más beneficiados? Sin duda, pero hay que buscar cómo crear empleo».

Rosell afirmó que no es futurólogo y que no sabe cuándo se empezará a crear empleo, pero sí señaló que le gustaría que ocurriese antes de fin de año.

El presidente de la Confederación Española de Autónomos (CEAT), Pedro Barato, aseveró que la reforma laboral es «muy favorable para los autónomos», y aseguró que si junto a ella se produjese una activación de créditos blandos, las administraciones pagasen sus deudas y se abordase la reforma tributaria, en concreto que no tengan que pagar el IVA antes de cobrarlo, «los autónomos podríamos empezar a crear empleo a finales de este año o en el primer trimestre de 2013». Y fue más allá al cuantificarlos: si hay 3,3 millones de autónomos y cada uno crease medio empleo, se estaría hablando de 1,5 millones de empleos más dentro de un año.

Por otra parte, un dictamen del Banco Central Europeo (BCE) ha avalado la reforma financiera aprobada por el Gobierno español al considerar que fortalece la resistencia del sector y limita el ámbito de la intervención pública, si bien avisa en contra de las fusiones celebradas sólo entre entidades débiles. La dirección del BCE, encabezada por Mario Draghi, aplaude las medidas dirigidas a sanear los balances de cajas de ahorros y bancos dañados por su exposición al riesgo del sector inmobiliario.