El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha advertido hoy de que no va "abdicar" de sus responsabilidades para lograr el crecimiento económico y la creación de empleo y, por ello, mantendrá la reforma laboral porque considera que es necesaria para España.

Rajoy ha hecho esa cerrada defensa de la reforma laboral en un acto del PP en Oviedo un día después de que el PSOE anunciara que, si el Gobierno no la modifica, recurrirá esa norma ante el Tribunal Constitucional.

El jefe del Gobierno ha señalado que sabe que hay gente que la critica y que dice que no le gusta, y ha reconocido que está en su perfecto derecho.

Pero, frente a ello, ha señalado que él tiene el deber y el derecho de explicar a los españoles por qué adopta una decisión como esta.

A su juicio, era indispensable cambiar la ley después de que no sirvieran "absolutamente para nada" las dos modificaciones realizadas por el Ejecutivo socialista y a la vista de las cifras de paro que hay en España.

"Hemos intentado hablar, hemos escuchado, hemos dialogado, pero lo que no puede hacer un Gobierno es abdicar de sus responsabilidades", ha reiterado.

Para Rajoy, hasta el PSOE sabía que era necesario hacer una reforma del mercado laboral y tanto los empresarios como los sindicatos consideraban que había que abordarla y mantuvieron reuniones con el fin de intentar llegar a algunos acuerdos.

"En 2012 necesitamos mucho más. Hemos de tener una legislación como el resto de países europeos. Podríamos tener unas normas de la Edad Media si tuvieran efectos positivos para los españoles, pero con el desempleo actual -ha explicado- hay que cambiar".

Tras recordar que España es el país de la UE con mayor índice de desempleo y la especial incidencia que tiene entre los jóvenes, Rajoy ha puntualizado que su Gobierno no hace reformas para "fastidiar" a nadie, sino que todas tienen como objetivo el interés general, luchar contra la crisis y crear empleo.