Oviedo, J. CUARTAS

La empresa asturiana Alsa volverá a hacerse con la gestión de Bilbobus, la compañía de autobuses de la capital vizcaína, tras el acuerdo alcanzado con la francesa Veolia, que había asumido este servicio en 2008 sustituyendo a Alsa.

Desde entonces, el servicio de transporte urbano bilbaíno se ha deteriorado. Veolia, que en 2010 pasó a ser el mayor grupo mundial del sector tras su fusión con Transdev, afrontó una sucesión de conflictos con los trabajadores (que se enconaron últimamente) y fue objeto de correctivos municipales por deficiencias en el servicio: limpieza, puntualidad y quejas de los usuarios.

El traspaso de Veolia a TCSA, filial de Alsa, está ahora pendiente de aprobación municipal.

Alsa, además de servicios surprarregionales con origen y destino en el País Vasco, es titular en esa comunidad de otras concesiones de servicios de transporte, entre ellos Bizkaibus.

La matriz de Alsa -la británica National Express (NX), participada por la familia Cosmen- ha sido preseleccionada a su vez por el Gobierno británico para pujar por dos concesiones ferroviarias: cercanías del Sur de Londres y la línea entre Londres y el Sur de Essex. Londres levanta así el veto a NX para ampliar su negocio ferroviario tras haber renunciado en 2009 a una concesión por sus pérdidas.