Iván Fernández Lobo comenzó sus estudios como ingeniero informático en la Universidad de Oviedo y los acabó al otro lado del charco, en Carolina del Norte. Cuando retornó, repleto de conocimientos sobre diseño gráfico, su intención fue la de crear una "spin off" (una compañía que nace en el ámbito universitario). Su idea era la de diseñar un sistema, un software, para que los creadores de videojuegos pudieran trabajar y crear juegos de forma mucho más sencilla. "Se trataba de una tecnología fácil, un motor gráfico, para que otros pudieran hacer sus juegos", resume. La idea debía ser buena, ya que a posteriori algunas grandes compañías del sector han amasado grandes fortunas desarrollando programas similares. Pero en aquella ocasión no tuvo éxito.

Sin embargo, Fernández Lobo, que también trabajó durante varios años como profesor asociado en la Universidad de Oviedo, saca una lectura bastante positiva de aquella experiencia. Sobre todo de los contactos que logró realizar. Ahora asegura que se está dando una "democratización en el mundo del videojuego. Hay programas que permiten realizarlos de forma rápida, e incluso para gente que pueda venir de otros sectores". Fernández Lobo fue también uno de los promotores de la candidatura de Shigeru Miyamoto, diseñador de videojuegos de Nintendo, el creado de "Super Mario", para el premio "Príncipe de Asturias" de Comunicación y Humanidades. Galardón que el japonés recibió en 2012.