Los sindicatos temen que la desaceleración de la economía china acabe provocando un frenazo en las plantas asturianas de Arcelor-Mittal a pesar de los buenos resultados del último año. Los excedentes de acero del gigante asiático están provocando una caída de precios en el mercado global, con lo que los márgenes de ventas que pueden obtener las fábricas de Avilés y Gijón se reducen. Ese factor amenaza con lastrar los resultados de las factorías asturianas, lo que sumado a las pérdidas de valor de Arcelor-Mittal en Bolsa, en parte también motivadas por las turbulencias chinas, podría condicionar las inversiones que la multinacional tiene en cartera y que son vitales para el futuro de las fábricas en el Principado.
En el último comité europeo de Arcelor-Mittal -celebrado antes de la que se produjeran las devaluaciones del yuan para favorecer las exportaciones chinas y de las caídas de las Bolsas asiáticas con repercusiones globales- ya se analizó el problema de la competencia china como el principal problema para Arcelor-Mittal. "La siderurgia china tiene un excedente de producción que su demanda interna no es capaz de absorber. Como consecuencia, los mercados internacionales se están inundando de acero chino, con lo que está cayendo su precio", señaló José Manuel Castro, secretario general de la sección sindical intercentros de CC OO en Arcelor-Mittal en España y miembro del comité europeo de la multinacional siderúrgica.
Menos márgenes
Castro destacó que la caída de precios del acero se puede agravar con las alarmas que se han disparado a causa de la salud del gigante chino y afectar a la competitividad de las factorías asturianas. "Buena parte de la producción de las plantas de Avilés y Gijón va para fuera, principalmente al mercado europeo, donde la competencia de las exportaciones chinas ya se está notando. Con la caída de precios se reducen los márgenes de ventas y se eliminan los efectos positivos de la caída del precio de materias primas como el mineral de hierro o del petróleo, que reduce los costes del transporte y repercute en el precio del gas, muy importante en el proceso siderúrgico", explicó José Manuel Castro.
"A corto plazo, en Asturias no se apreciarán los efectos de China, pero a medio plazo podrían notarse porque la caída de precios del acero repercutirá en las ganancias de las fábricas", destacó por su parte Pedro Cancio, secretario general de USO en Arcelor-Mittal, que señaló que las inversiones pendientes en las plantas de Arcelor-Mittal en la región "dependen de que seamos competitivos y la reducción de los márgenes nos podría afectar". No obstante, Cancio destacó los buenos resultados obtenidos por las fábricas asturianas el pasado año y en lo que va de este.
"Con las inversiones hay que ser muy cautelosos. Las que ya están anunciadas, como la reforma de la acería LD-III de Avilés, la ampliación del tren de carril de Gijón o las mejoras en los de alambrón y chapa gruesa, no corren peligro; pero aún están pendientes otras como las destinadas a las nuevas baterías de coque de Gijón, que en su día ya estuvieron previstas y se aplazaron por la crisis económica global", señaló José Manuel Castro, que destacó la importancia de esa última inversión ante el próximo final de la vida útil de las baterías de Avilés y para garantizar la independencia de suministros y no depender de las oscilaciones de los precios de los transportes.
Además, las continuas pérdidas de valor de Arcelor-Mittal en Bolsa no contribuyen a generar optimismo con respecto a las inversiones. En dos meses, el gigante siderúrgico ha perdido más de la cuarta parte de la su valor en la Bolsa. Ayer, al igual que el lunes y varias jornadas de las dos últimas semanas, Arcelor-Mittal registró la mayor caída dentro del selectivo IBEX-35. Cerró la sesión con sus acciones a 6,677 euros, el 3,30% menos que la jornada anterior. Por debajo de Arcelor-Mittal en cuanto a caídas se situó Acerinox, con un descenso del 3,22%, lo que muestra los temores de los inversores al acero chino.
