El plan de ahorro de costes que ha emprendido la multinacional Du Pont tendrá un "impacto mínimo" en el empleo que el grupo químico estadounidense tiene en Asturias. Según informó la compañía, las instalaciones asturianas, con más de 1.200 trabajadores, están en disposición de cumplir los objetivos marcados desde la sede central de Delaware sin abordar ajustes relevantes de plantilla. Du Pont Asturias elude así los duros recortes ya iniciados en EE UU con 1.700 despidos y aprobados antes de la reciente fusión con Dow Chemical. El impacto que esta última operación corporativa pueda tener en las plantas de Tamón es aún una incógnita.
Du Pont anunció en noviembre un plan global para recortar en 2016 costes por valor de 700 millones de dólares (unos 645 millones de euros al cambio de ayer). Fue un movimiento previo al acuerdo con la también estadounidense Dow Chemical Company para crear un gigante con 117.000 empleados y una facturación superior a los 84.000 millones de euros. En ese mismo momento, Du Pont concretó que antes de la integración reduciría su plantilla mundial un 10%, lo que implica prescindir de 5.300 de sus 53.000 trabajadores en unos meses.
La dirección que encabeza Eduard Breen, consejero delegado, está comunicando a los distintos centros de Du Pont en el mundo los objetivos de reducción de costes. "Todo indica que el impacto sobre el empleo de Du Pont Asturias, de producirse, será mínimo", informó la compañía. Según esa misma versión oficial, los centros de trabajo de Tamón están en condiciones de cumplir las instrucciones de Delaware sin medidas traumáticas porque "los procesos que aquí hacemos no se ven especialmente afectados, y porque nuestra flexibilidad y competitividad nos ayudan a gestionar reducciones de costes sin efecto significativo en nuestra cifra de empleo".
El complejo de Du Pont en Asturias esta formado por tres fábricas químicas -de Nomex, del componente del Nomex ICL y de productos fitosanitaros, destinados a la agricultura-, así como por un centro global de servicios que es el mayor de la compañía tras su sede central estadounidense. Las fuentes consultadas no descartaron por completo que pueda producirse algún despido, aunque remarcaron que la política de la compañía en Asturias "ha sido siempre" procurar la recolocación de las personas de las que prescinde Du Pont.
La comunicación de la multinacional que en Asturias dirige Enrique Macián, presidente de Du Pont para España y Portugal, descarta que en Tamón vayan a reproducirse recortes como los programados en Delaware, donde se han confirmado 1.700 despidos. Quedan por despejar las incertidumbres sobre el impacto de la fusión entre Du Pont y Dow Chemical, un proceso que podría quedar listo en septiembre y que alumbrará un gran grupo (Dow Du Pont) formado por tres sociedades cotizadas: una dedicada a los negocios agrícolas (plagicidas), otra a ciencia de los materiales y una tercera de productos especializados. Las fábricas asturianas se separarán e integrarán en dos de esas sociedades.
La fusión podría dar lugar a nuevos ajustes a escala mundial por el solapamiento de actividades entre las dos compañías. Al presentar la fusión, Du Pont y Dow destacaron que su unión propiciará elevadas sinergias, con unos ahorros de costes de 3.000 millones de dólares. Aparentemente no existen duplicidades entre los negocios que Dow tiene en la península ibérica y las plantas fabriles de Asturias, con una producción orientada a la exportación.
Durante la misma presentación, la cúpula de Du Pont expresó que la multinacional afronta un año muy complejo para su mercado por dificultades como la baja cotización de las materias primas, la crisis de los países emergentes o la revalorización del dólar frente a otras divisas, que penaliza las exportaciones de las fábricas estadounidenses.
