La investigación que durante 2015 realizó la Fiscalía y la que antes desarrolló la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil sobre UGT en Asturias partió de una denuncia de antiguos trabajadores del sindicato y de IFES que, según el abogado ugetista Francisco Alonso, "acutaron por despecho". Tal denuncia puso el foco sobre las fundaciones y sociedades mercantiles que usa el sindicato para los cursos de formación. La utilización de "sociedades vinculadas" como proveedoras de bienes o servicios está permitida por la ley con ciertos requisitos; entre ellos, que se facture a precios de mercado. Las entidades concernidas por la investigación judicial son por ahora tres.

IFES. El Instituto de Formación y Estudios (IFES) pertenece enteramente a UGT. La fundación tuvo en Asturias una estructura fija de 15 trabajadores, además de decenas de monitores para los cursos, en los que llegaron a participar 5.000 alumnos al año.

Infastur. Sociedad mercantil constituida en 1995 y de la que UGT-Asturias es administrador único. Nació para la organización de cursos aunque a partir de 2001 se dedicó básicamente al alquiler de ordenadores, actuando como proveedor de IFES.

Localmur. Sociedad controlada por el aparato nacional de UGT y dedicada al alquiler de locales. IFES es su cliente casi exclusivo y figura como accionista. IFES usa para sus cursos en Asturias locales arrendados en Oviedo y Navia, así como unos propios en Langreo.