La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Los controles de Sadei acabaron en 1986 con la práctica municipal de hinchar el padrón

Sadei acabó con la picaresca en los ayuntamientos para esconder las caídas de población. En los años ochenta del pasado siglo Sadei inició su colaboración con el Instituto Nacional de Estadística (INE) para participar en las revisiones padronales y en los censos de población. La revisión del padrón de 1986 permitió elaborar el primer registro exhaustivo de población y en él se descubrieron numerosas duplicidades en los datos. Muchas personas figuraban como habitantes de varios municipios. "Para no perder categoría, muchos ayuntamientos no comunicaban correctamente las bajas del padrón, con lo que tenían hinchada la cifra de habitantes. Sin embargo, a partir de 1986, con la explotación de los datos, se regularizó esa situación", destaca Ramiro Lomba, actual director de Sadei.

En 1986, la Sociedad Asturiana de Estudios Económicos e Industriales también publicó el primer nomenclátor de la región, en el que figuraban todos los núcleos de población de Asturias con sus habitantes. "Se utilizaron los topónimos oficiales, pero también los tradicionales, obtenidos hablando con paisanos de cada pueblo", apunta Lomba.

Compartir el artículo

stats