El empleo de las Administraciones ya está creciendo en diez de las diecisiete comunidades autónomas: Aragón, Navarra, Valencia, Castilla-La Mancha, Cataluña, Galicia, Baleares, la Rioja, Murcia y también en Asturias. En este último caso, el número de funcionarios y otros trabajadores ha repuntado en el último año en los ayuntamientos y en el Principado, que con 35.865 personas en nómina está muy cerca del nivel de empleo que tenía a principios de 2010, antes de que comenzará el ciclo de recortes en el gasto público en España.
El "Boletín del Personal al Servicio de la Administración", elaborado por el Ministerio de Hacienda, constata que 2015, año electoral, fue un ejercicio en el que se relajaron las políticas de austeridad y sus efectos sobre el empleo en el sector público. Particularmente en el caso de las autonomías. Fue en sus departamentos administrativos y principales servicios donde más creció el número de trabajadores. De manera agregada, las plantillas autonómicas pasaron de 1,28 millones de personas a 1,29 millones. Las universidades españolas también ganaron empleados (unos 600, hasta los 147.770). En cambio, continuó el declive en la Administración central y sus ramificaciones periféricas y también en los ayuntamientos, salvo en regiones como Asturias.
En los siguientes puntos se exponen las peculiaridades de la evolución del empleo público en Asturias.
El total. La región sumó 236 puestos más desde enero de 2015 en el conjunto de la Administración, hasta situarse el total en 56.724 personas. Considerando que los ajustes fiscales comenzaron en 2010, Asturias ha perdido 5.141 empleos públicos desde enero de ese año. En el conjunto de España el recorte superó los 179.000 empleos, de forma que la reducción de plantillas públicas en Asturias ha sido equivalente al 2,8% del total nacional, proporción que resulta superior a lo que representaba el empleo asturiano respecto de ese mismo total (2,3%). Tales recortes se sustanciaron principalmente mediante la no incorporación de nuevos trabajadores para cubrir vacantes por jubilación (reducción a mínimos de la llamada tasa de reposición) y restringiendo la contratación de eventuales.
Administración central. Las delegaciones de ministerios y otros organismos públicos iniciaron el año en Asturias con 9.115 empleados, 96 menos que en enero de 2015. El recorte desde 2010 ha sido superior a 2.000 trabajadores.
Administración autonómica. El Principado tiene una nómina de 35.865 trabajadores que ha aumentado en 200 en el último año. Según el informe comentado, la Administración regional ha incrementado plantilla en las consejerías y sus organismos dependientes (donde trabajan 7.184 personas, principalmente en puestos administrativos); los ha ganado también en la sanidad (hasta totalizar 14.989 personas) y ha perdido 35 en la educación (con 12.283 trabajadores). El Principado está muy cerca del empleo que tenía en 2010 (35.921 trabajadores), aunque tiene menos personal que entonces en las consejerías, en la sanidad y en la educación. En cambio, la plantilla de Justicia que depende del Principado es mayor que la de hace seis años, siempre según esa información oficial.
Ayuntamientos. Las corporaciones locales forman la parte de la Administración que ha sufrido un ajuste más severo de personal en estos años. Los ayuntamientos asturianos perdieron uno de cada cuatro puestos de trabajo, según se infiere del informe de Hacienda. Los datos en este caso proceden de las afiliaciones a la Seguridad Social y recogen, además de los referidos al personal funcionario y laboral, a colectivos como los beneficiarios de planes de empleo locales. La nómina municipal tocó fondo a principios de 2015 y ha empezado a subir, con 8.956 trabajadores en 2016, 158 más que hace un año.
Universidad. La institución académica tenía en enero 2.788 empleados, 26 menos que en 2015 y 162 menos que en 2010.
