Los precios de los hoteles, restaurantes y cafeterías asturianos comienzan a subir después de años prácticamente congelados, gracias a la recuperación de las ventas impulsadas por el turismo. Según el Instituto Nacional de Estadística (INE), estos establecimientos incrementaron el precio de sus servicios una media del 1,3% durante julio en comparación con el mismo mes del año anterior. Es un porcentaje modesto, pero que dentro de España sólo superan dos destinos turísticos como son Baleares (2%) y Canarias (1,6%), además de Navarra, que durante ese mes celebró la fiesta de San Fermín (1,6%).

El dato es relevante, ya que la patronal regional de este sector (Otea) asegura que es la primera vez en ocho años en la que los precios están subiendo. "Coincide con un aumento de los visitantes y la necesidad de los establecimientos de ganar rentabilidad", señalaron fuentes esta asociación. Añadieron que, por ejemplo, se está dando ya una recuperación de los precios de las habitaciones de hotel. Fruto de la incipiente mejoría económica, en los restaurantes están cediendo algo de terreno los menús y ganándolo la carta, comentó un portavoz. "Es algo que llevamos notando desde el año pasado, aún de forma incipiente, pero es algo significativo", apostilló.

En líneas generales, el índice de precios al consumo (IPC) sufrió el pasado mes una caída del 0,5% en Asturias en comparación con 2015, un descenso cercano al registrado en el conjunto del país (-0,6%). La caída obedece al abaratamiento de los gastos asociados a la vivienda y al retroceso del coste del transporte, debido al descenso que experimentó el petróleo y que, aguas abajo, ha arrastrado a los combustibles.

Por contra, la cesta de la compra registró una subida del 2,8%. En tasa interanual crece con intensidad el precio de la fruta fresca (14,6%), el del pescado (6,3%), las patatas (8,5%) y el aceite (8%). También hubo bajadas, aunque fueron más modestas. Así, se abarata el precio de la leche (-2,2%) y el de las bebidas alcohólicas (-1,9%).

El Ministerio de Economía destacó, tras conocer los datos, que los precios a la baja están favoreciendo la competitividad de la economía y de las exportaciones. No obstante, el Gobierno central también indicó que la caída es imputable a algunos factores estaciones relacionados con las rebajas del verano. Los sindicatos, por su parte, aseguraron que ya es hora de impulsar "potentes" incrementos salariales para evitar la deflación.