Los robos de datos bancarios, de tarjetas de crédito y los engaños a través de internet haciéndose pasar por una entidad financiera para saquear las cuentas corrientes, lo que se conoce como "phishing", han crecido con fuerza en Asturias durante los últimos años. Según las cifras que acaba de divulgar el Ministerio de Interior, el año pasado se detectaron en suelo asturiano 57 estafas bancarias, salen a casi cinco al mes, y son el doble de las que había hace cuatro años cuando el Gobierno comenzó a recoger este tipo de datos ante el incremento de la criminalidad por esta vía. Lo que no ha aumentado son las detenciones, incluso disminuyen, ya que los ladrones buscan cada vez métodos más sofisticados para sustraer este tipo de datos.
Hay varios "modus operandi" para perpetrar este tipo de delitos, explica la Policía Nacional. Por un lado, están los ladrones "tradicionales" que se dedican a sustraer las tarjetas de crédito, ya sea por algún descuido en el cajero o por el simple robo de la cartera. Aunque suelen ir a tiro fijo, y buscan personas que puedan llevar siempre consigo el pin de la tarjeta, generalmente gente mayor, para sacar el dinero antes de que ésta sea anulada.
En esos casos la Policía asegura que es esencial la rapidez a la hora de poner la denuncia para intentar detener a los infractores, ya que las cámaras de los cajeros suelen tener una vida determinada antes de que las imágenes se borren. Por lo que actuar en ese plazo es esencial.
Pero lo que realmente trae de cabeza a las fuerzas del orden es el aumento de los casos de estafa a través de internet. Generalmente mediante correos electrónicos que suplantan la identidad de una entidad bancaria o de empresas de electricidad, gas o telefonía, con el objetivo de robar datos "delicados". Pese a los múltiples avisos de la Policía de ignorar este tipo de intentos de estafa sigue habiendo quien pica el anzuelo. "Afortunadamente", señalan, "las IP (la dirección que identifica desde donde se suele hacer la conexión) dejan huellas".
Aunque el número de estafas está creciendo con fuerza, aumentaron un 18,8% en la región entre 2014 y 2015, lo que no suben son los casos que se esclarecen con éxito, solo 19 el año pasado. Esto se debe a que los ladrones utilizan métodos cada vez más sofisticados para recabar los datos y eludir con éxito el control policial. Pese a los esfuerzos de las fuerzas del orden en 2015 solo se produjeron 6 detenciones en Asturias relacionados con estas estafas bancarias, fueron nueve menos de las que hubo en 2014.
