Los sindicatos mayoritarios adelantaron ayer cuáles serán sus posiciones ante los cercanos trabajos de la Comisión del Pacto de Toledo, de la que forman parte, para reformar las pensiones de manera que se asegure sus sostenibilidad financiera, ahora en riesgo. Tanto CC OO como UGT abogan por reforzar los recursos de la Seguridad Social vía impuestos.

El secretario general de CC OO, Ignacio Fernández Toxo, afirmó que el sistema público de pensiones es "sostenible" pero "si se hacen cosas distintas a las que se han hecho hasta ahora", se da "marcha atrás" en la reforma de pensiones de 2013 y se acometen medidas para mejorar en 40.000 millones los ingresos de la Seguridad Social de aquí a 2040. De lo contrario las pensiones serán "menores", dijo.

CC OO ha propuesto que las pensiones de supervivencia (viudedad y orfandad) pasen a financiarse a través de impuestos. Sin descartar esa opción, Toxo defendió con carácter general que el sistema reciba más recursos por vía tributaria. "De impuestos generales tienen que llegar recursos, pero no solo para pagar las pensiones de supervivencia, viudedad y orfandad, sino porque necesitamos incrementar los ingresos de la Seguridad Social", ya que actualmente existen 9 millones de pensionistas y jubilados en España, pero en 2030 serán 15 millones.

En este sentido, el líder de CC OO subrayó que es necesario incrementar los ingresos de la Seguridad Social en 4 puntos de PIB (unos 40.000 millones de euros) de aquí a 2040 para que el sistema tenga "futuro". El montante destinado a las pensiones de supervivencia asciende a unos 21.000 millones de euros.

UGT también defenderá ante la Comisión parlamentaria del Pacto de Toledo la financiación de las pensiones, además de con cotizaciones, con impuestos y sin excluir a ninguna pensión.

En concreto, el sindicato plantea el diseño de una cesta de impuestos cuya recaudación se destinaría íntegramente a financiar el sistema de pensiones. Esta cesta tendría un carácter finalista totalmente o con mayoría de impuestos directos (progresiva y redistributiva) y se calcularía de forma que siempre sea mayor que la diferencia entre ingresos y gastos, lo que permitiría dotar de nuevo el Fondo de Reserva.

UGT defiende asimismo un nuevo mecanismo de revalorización para garantizar el poder adquisitivo de los pensionistas, derogando la fórmula que está en vigor desde 2014.

Para acabar con el déficit de la Seguridad Social, UGT plantea además eliminar las bonificaciones a la contratación y destopar las bases de cotización. "La subvención a la contratación no tiene ningún sentido, porque no genera ningún empleo", ha manifestado el secretario general ugetista, el asturiano Pepe Álvarez.