El juicio contra la directora del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, acusada de negligencia cuando era ministra de Finanzas de Nicolas Sarkozy, se inició ayer en París. La presidenta del tribunal leyó un resumen de lo que se reprocha a Lagarde: haber recurrido en 2007 de forma irregular a un arbitraje para resolver un contencioso entre el Estado y el empresario Bernard Tapie por el grupo Adidas que resultó favorable a Tapie (próximo al expresidente Nicolas Sarkozy), ya que el Estado tuvo que indemnizarle con 404 millones de euros. Lagarde podría ser condenada a una pena de hasta un año de cárcel y 15.000 euros de multa. La directora del FMI defendió su inocencia y criticó la "agresividad" del fiscal.