La Compañía Telefónica tendrá que ocuparse, al menos durante un año más, de prestar el servicio público de cabinas telefónicas y de elaborar y entregar las guías tras ser designado para ello por el Gobierno. El ejecutivo ha adoptado este procedimiento de designación directa tras quedar desiertos los concursos convocados para renovar estos servicios, incluidos en el servicio universal de telecomunicaciones y que hasta final de año estaban adjudicados a Telefónica. La designación se realiza hasta el 31 de diciembre de 2017, aunque se prevé que pueda extenderse un año más. De esta forma, el Gobierno impone la prórroga del mantenimiento del servicio de cabinas, en cuestión a causa de a generalización de la telefonía móvil.