Al calor de la bioincubadora del Centro Europeo de Empresas e Innovación (CEEI), nació y está creciendo la joven compañía Bioquochem. La empresa, según explica su responsable de innovación, David Hevia, está desarrollando un sistema para medir de forma rápida algunos parámetros ligados con el envejecimiento, como si se tratara de un análisis de sangre, pero de una forma mucho más cómoda y rápida. El mercado del envejecimiento será de los que dará un tremendo estirón durante los próximos años, según auguran muchos expertos, y algunas compañías asturianas ya están intentando posicionar sus productos. "Estamos explorando una fase para poder llevar este sistema al usuario final", asegura Hevia.
