Las pensiones subieron en enero el 0,25%, tras aplicar el Gobierno por cuarto año consecutivo el nuevo mecanismo de revalorización que la vincula al saldo de ingresos y gastos del sistema público de prestaciones. En los tres ejercicios anteriores (2014, 2015 y 2016), ese mínimo incremento, de apenas dos euros para las pensiones medias, no supuso pérdida de poder adquisitivo, sino al contrario, porque la inflación fue negativa.

Sin embargo, en 2017 la pérdida si se producirá. El índice de precios al consumo (IPC) inició el año con una subida interanual del 3%, principalmente por los precios energéticos (carburantes, luz y gas). Los observatorios económicos que predicen el comportamiento de la inflación estiman que seguirá subiendo hasta mitad de año y que se reducirá en los meses finales. La Fundación de las Cajas de Ahorros (Funcas) calcula que la inflación media del ejercicio rondará el 2,2%, de modo que la pérdida de capacidad de compra será prácticamente de dos puntos para los pensionistas. Salvo que los Presupuestos de 2017, aun por elaborar, incluyan una subida extra. El PSOE la exige como condición para negociar con el PP.